En términos interanuales, y como sucede en Castilla y León y en España, donde el paro ha caído un -0,56% y un -3,04% respectivamente, observamos como las cifras de Soria muestran un descenso del -0,12%.
La Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) considera positivo el descenso de parados en 15 personas que muestra el registro público de empleo en diciembre de 2013 en nuestra provincia, aunque el comportamiento en los sectores de la construcción, de la industria y de agricultura ha sido peor, con subidas de 25, 23 y 19 personas respectivamente.
Este valioso dato para nuestra provincia en el que en la tasa interanual (periodo de diciembre 2013-diciembre 2012) el desempleo bajó en 8 personas, con el leve descenso del -0,12%, podría representar un incipiente cambio de tendencia en la evolución del paro en Soria respecto de años anteriores.
Por ello, desde FOES aunque se valora de forma positiva este descenso en el desempleo, se insiste en la importancia de ser prudente en la valoración de la estadística del Ministerio de Empleo, por lo elevada que continua siendo nuestra tasa de paro, porque Soria registra a finales de 2013 la terrible cifra de 6.734 desempleados y por estimar que 2014 será todavía un año difícil para las empresas y para el empleo.
Aunque los datos macroeconómicos tienen una tendencia más satisfactoria, lo cierto es que las pymes y los autónomos siguen sufriendo la escasez de flujo crediticio que paraliza la inversión, una fuerte presión fiscal, un elevado coste energético, la falta de actividad, un consumo muy contraído y una situación complicada con muchas sombras todavía en el panorama económico.
FOES confía en que se sigan haciendo reformas desde las Administraciones Públicas, con una mayor profundización en la reforma del mercado de trabajo, unido a medidas para estimular la actividad económica, como cuestiones fundamentales en las que tendrán que continuar trabajando en este año para que 2014 sea el inicio de la recuperación que todos esperamos.
FOES una vez más, insiste en el protagonismo de las empresas como verdaderos motores de la creación de empleo y de la recuperación económica, siendo imprescindible para ello impulsar y facilitar su actividad productiva.