Es la persona que intentó prender un colchón en la Comisaría, y que provocó que tres personas fueran atendidas por inhalación de humo.
Sobre las 5.00 horas de la madrugada del pasado viernes 10, la Policía Nacional detuvo, en el recinto cerrado que alberga un cajero automático de una sucursal bancaria, a un hombre de 45 años, que sería el presunto autor de un robo de unos edredones que se habría producido instantes antes.
Este robo fue perpetrado en una tienda de la calle Comuneros de Castilla. El detenido, J.M.H.G., fue el mismo hombre que intentó prender un colchón ignífugo en la tarde del viernes en el calabozo de la Comisaría, y que provocó que tres personas fueran atendidas en los servicios médicos por inhalación de humo.
La investigación de la Policía Nacional ha permitido determinar que este individuo, que tiene un amplio historial delictivo, podría ser presuntamente el autor de otros cuatro delitos y faltas cometidos la pasada semana en la capital. El más grave, la tentativa de robo con intimidación de un vecino de la capital a las 22.00 horas del jueves 10 en la calle Real. Tras pedirle un cigarro, lo empujó contra una pared y lo amenazó con una navaja para que le diera el dinero. No consiguió su objetivo.
También sería, supuestamente, el autor de dos tentativas de robo ocurridos en la noche del miércoles al jueves en sendos establecimientos comerciales de la plaza Mayor y de la avenida de Mariano Vicén, respectivamente. En ambos casos fracturó el cristal pero no llegó a entrar al establecimiento.
Por último, el día 7, profirió, presuntamente, amenazas graves contra un camarero de un bar de alterne de la capital.