Aliados con Chunta Aragonesista, el PCAS registra en la Cámara Baja una serie de preguntas al ministro de Medio Ambiente para conocer las consecuencias de la explotación que extraerá magnesita.
El Partido Castellano (PCAS), ha registrado en el Congreso de los Diputados, por medio de Chesús Yuste, Diputado de Chunta Aragonesista (CHA), formación con la que habitualmente colabora este partido que tiene representación municipal en Borobia, una batería de preguntas al Ministro Arias Cañete, con el objetivo de conseguir información sobre las consecuencias en el medio ambiente que traería la apertura de esta mina a cielo abierto en la localidad cercana al Moncayo.
En concreto los castellanistas cuestionan los efectos ha tenido la apertura de minas de este tipo en otros lugares de España, con la variación en la población de las localidades próximas, creación directa de puestos de trabajo, reducción de actividad agrícola y ganadera, etc. También quieren saber las garantías ofrece la empresa de rehabilitación en caso de que acontezca algún accidente, y, por último, preguntan sobre la solicitud de informes independientes sobre las secuelas que producirá la de la apertura de esta explotación.
Para el Partido Castellano, la mina borobiana es "un proyecto aniquilador", argumentando para ello que afectaría a un acuífero de la Sierra de Tablado, donde nacen los ríos Manubles, Aranda, Isuela y Ribota, que nutren de agua de boca a Aragón.
La "hipotética" creación de veinte puestos de trabajo tras la apertura de la mina, "dañaría, e incluso eliminaría la actividad agricultora y ganadera de la zona", han afirmado a la vez que esta actividad "no es desarrollo, ni economía sostenible" ya que en su opinión, se destruirán los recursos básicos de la tierra "que ya no se podrán recuperar".
Según ha apuntado, la mina se remonta al año 2000, cuando los antiguos propietarios de la empresa Magnesitas de Borobia intentaron llevar a cabo la explotación de este mineral. En aquel momento, el alcalde del municipio, el independiente Blas Jiménez, se opuso a esta actividad "y llevó a cabo una consulta popular en la que el 97% del pueblo se pronunció en contra".
En su visión de los hechos, los castellanistas han recalcado que Magnesitas Navarras, la empresa que abandera el proyecto, "intentó abrir una mina similar en el Valle de Baztán (Navarra), pero fue rechazada". En función de las informaciones que manejan, los datos ofrecidos por la firma navarra "son poco claros, dice que sólo va a afectar a diez hectáreas, pero han solicitado 480". Igualmente han señalado se prevén voladuras "con 2.500 kilos de explosivos, goma 2 eco y nagolita, y una parte importante de la toxicidad de estos explosivos irá al agua".
En contraposición, han reseñado que en países como Estados Unidos o Japón la magnesita se obtiene de la salmuera, por lo que "no es necesario destruir un paisaje y un ecosistema" en un término municipal que se encuentra a 300 metros del Parque Natural del Moncayo a 300 metros del Parque Natural del y en cuyo suelo hay cultivos de cereales, pastos, arbolados y plantas medicinales.
También han señalado las distintas movilizaciones que se ha llevado a cabo en esta demarcación, y la creación de varias plataformas en defensa del agua y la tierra, sin olvidar las 12.000 firmas recogidas contra la explotación minera.
"El proyecto de la mina ha sido gestionado por la Junta de Castilla y León sin consultar a Aragón, a pesar de que las consecuencias de la explotación afectarán a las dos comunidades", han observado, y aunque Borobia está en la Sierra de Moncayo, esa vertiente no tiene la declaración que posee la zona aragonesa de estas montañas. Han incidido por ello la oposición del Gobierno de Aragón y han significado concluyendo que "también se han levantado ampollas entre los más de cien propietarios de las tierras donde se ubicará la explotación, enfrentados ante la posibilidad de vender los terrenos, que son pro indiviso".