El objetivo es incidir en su uso siempre y en todos los asientos hasta convertirlo en un hábito. En septiembre ya se efectuó una campaña similar donde fueron controlados 6.027 vehículos en las carreteras sorianas.
Entre los días 10 y 16 de marzo la Dirección General de Tráfico (DGT) llevará a cabo una campaña especial de concienciación, a través de divulgación de mensajes en medios de comunicación y de intensificación de controles en las carreteras tanto por parte de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, como de los agentes de las Policías Locales de los Ayuntamientos adscritos a la campaña especial de control del uso del cinturón y de los sistemas de retención infantil.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil aumentarán los controles sobre dicho factor de riesgo, con el objetivo de realizar unas 43.000 inspecciones a conductores que circulen por las carreteras de Castilla y León. En la última campaña llevada a cabo en septiembre, las carreteras sorianas contabilizaron un total de 6.027 controles, la tercera de la Comunidad. En cuanto a las sanciones, se produjeron 67, esto es, el 1,01%.
No llevar puesto el cinturón de seguridad o no proteger a los menores cuando circulan en un vehículo con los sistemas de retención adecuados a su peso, estatura y edad es uno de los principales factores de riesgo en la carretera junto con la velocidad y conducir bajo los efectos del alcohol o sustancias estupefacientes.
En 2013, de las 63 personas que murieron en accidentes de tráfico ocupantes de turismo y furgoneta, 17 (26,98%) no llevaban puesto el cinturón de seguridad. De estos 17 fallecidos, 14 eran conductores y 3 pasajeros.
Para conocer el comportamiento de los usuarios en cuanto al uso de accesorios de seguridad se han realizado, desde comienzos del año 2006, estudios a nivel nacional basados en observaciones de campo y cuyos resultados la DGT obtuvo diversas conclusiones.
Así, en relación al uso de cinturón en turismos y furgonetas, se observó durante 2012 que el 90% de los conductores llevaban puesto el cinturón de seguridad. Esta cifra es similar en los acompañantes delanteros, un 91%. Es decir, 9 de cada 100 personas que ocupaban plazas delanteras en turismos o furgonetas usaron el cinturón de seguridad, consiguientemente, en torno al 10% no hicieron utilización de este sistema. En los asientos traseros, esta cifra de no uso se elevó hasta 20 de cada 100 ocupantes. Al producirse una ocupación menor en los asientos traseros que en los delanteros, para el total de ocupantes el porcentaje de uso se convierte en un 88%, esto es, 12 de cada 100 personas que viajaban en turismo o furgoneta no llevaban ceñido el cinturón de seguridad.
El cinturón de seguridad es un elemento básico y fundamental de la seguridad vial y reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente.
El airbag no es eficaz si no se complementa con la utilización del cinturón de seguridad. El cinturón de seguridad y el airbag están pensados para funcionar de forma complementaria.
El no utilizarlo en los asientos traseros supone un gran riesgo. En un impacto frontal, la probabilidad de que un ocupante de los asientos de atrás golpee mortalmente a otro pasajero de los asientos de delante puede ser hasta 8 veces mayor.
Protege tanto de salir despedido del habitáculo, como de impactar contra el parabrisas.
A 80 kilómetros por hora, un choque frontal sin llevar puesto el cinturón de seguridad, suele llevar fatalmente aparejado resultado de muerte o lesiones graves. El cinturón alcanza una máxima efectividad en los vuelcos, donde se reduce un 77% el riesgo de muerte.