Por razones que aún se desconocen, según ha explicado el vicario episcopal de Patrimonio de la Diócesis, Juan Carlos Atienza, este miércoles se ha desprendido una parte de los frescos de la bóveda de la capilla ermita de San Saturio, que se ha cerrado al público.
El fragmento caído es de aproximadamene un metro cuadrado, según Atienza, aunque corresponde a una zona en la que apenas hay imágenes, y la parte caída es más paisaje. La zona desprendida está junto a una imagen de San Juan, que no ha sufrido daños. No obstante, el vicario de Patrimonio no resta importancia al daño patrimonial, que habrá que reparar.
Para ello, lo primero que se ha hecho ha sido recoger los fragmentos, y ver el estado en los que se encuentran. También, ha indicado Atienza, se hará una revisión del estado de la bóveda, por si puede haber nuevos peligros de desprendimientos de los frescos.
En este momento, se desconocen las posibles causas de esa caída, puesto que, en principio, no hay goteras en la bóveda, por lo que se supone que no hay problemas de filtraciones de agua.