Insisten en salarios justos que aseguren una jubilación digna y su reconocimiento como bomberos forestales.
Un día más, miembros de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) han vuelto a mostrar públicamente sus reivindicaciones que pasan por el reconocimiento de su labor como bomberos forestales, unas condiciones salariales dignas y que sean considerados como servicio esencial de emergencias.
Así lo ha expresado el portavoz de estos trabajadores en Soria, Alfonso Caño, durante la concentración que llevan a cabo en la avenida Duques de Soria cada mediodía. Una concentración que da continuidad al encierro que llevaron a cabo en la sede de la brigada el pasado 28 de agosto, al igual que en las otras nueve bases de BRIF que el MAGRAMA (Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente ) tiene repartidas por todo el país.
En las reivindicaciones, Caño ha significado que el colectivo requiere "una segunda actividad" ya que su dedicación exclusiva y los salarios percibidos (en torno 800 euros mensuales además de un plus de 3 euros diarios por peligrosidad), no son suficientes con respecto a la actividad que realizan. Aquí ha reseñado que en TRAGSA, la empresa a la que pertenecen, se aduce que estos emolumentos se deben "a que las cosas están mal", aunque "no podemos encajar que prevén unas pérdidas de 40 millones de euros y van a repartir unos bonus a los directivos por cerca de 4 millones de euros, a razón de 50.000 euros" por cada uno de los miembros que rigen la empresa.
Caño ha significado también que su labor requiere un coeficiente tributario que asegure una jubilación digna, ya que la base de cotización actual no es suficiente, de ahí que planteen una segunda ocupación, fuera de la exclusividad, y además el reconocimiento como bomberos profesionales, que desarrollan su trabajo de extinción en la mayoría de los casos fuera de la provincia. Una situación que, aun admitiendo disponer de los medios necesarios, sí que requiere una mayor formación, "lo que iría en beneficio de nuestra seguridad a la hora de intervenir en un incendio".
Con todo, el portavoz de la BRIF de Lubia ha acentuado que "trabajamos durante todo el año, en extinción en verano y en prevención durante el invierno", significando además que sus labores no se ven fuera del periodo de riesgo en los fuegos, aunque "estamos trabajando y entrenando todo el año".
Ante la posibilidad de una huelga que podría ser programada a partir del 1 de octubre, Caño se ha mostrado cauto, a la espera de los avances entre la empresa y los trabajadores, confiando en que distintas sentencias favorables para el colectivo hagan que la patronal admita las peticiones de la plantilla. "Se están dando pasos, pero no cederemos ni un solo milímetro" hasta conseguir una "respuesta fiable" por parte de TRAGSA.
Las movilizaciones continuarán durante al menos, una semana más, a la espera de avances en sus reivindicaciones. Esta misma mañana, miembros de este colectivo ha repartido folletos explicativos por las calles de la ciudad.