Salen al paso de las declaraciones del alcalde asegurando que presentaron alegaciones al PERICHPH dentro de plazo con el fin de salvaguardar el inmueble, ubicado en la plaza del Salvador.
Ante las manifestaciones del alcalde de Soria a los diferentes medios de comunicación, y donde reseñaba que "ninguna de las propuestas y alegaciones presentadas por los propietarios de Vinos Lázaro iba encaminada a una mayor protección de ese inmueble que le protegiese del derribo, sino que se pretendía aumentar la edificabilidad", los propietarios de este negocio, ubicado en un inmueble en la plaza del Salvador han querido salir al paso de tales afirmaciones. Así, bajo el criterio de "no entrar en polémica con el Ayuntamiento", han manifestado que se han visto obligados a aclarar la situación real de la bodega en la que desarrollan su negocio, con más de ochenta años de antigüedad en una edificación que tiene dos siglos.
En dichas puntualizaciones, han recordado al regidor, Carlos Martínez Mínguez, que solicitaron en 2012, "en el último periodo de alegaciones al PERIPCH la protección ambiental recogida en el Plan Especial del 94 para las edificaciones de la plaza del Salvador". Es decir, "se interpretaba como una declaración de interés histórico social por la que se obligaba a su conservación manteniendo los usos originales específicos de conformidad con la legislación de aplicación, todo ello con la finalidad de poner en valor la estructura primitiva utilizando procesos de rehabilitación y conservación de los recintos históricos".
Asimismo, también han desvelado que en su solicitud pedían "la no aprobación definitiva de Plan Especial del Casco Histórico de Soria de la forma que fue expuesta al público, en tanto en cuanto no se corrigieran las deficiencias observadas". De este modo, y como objetivo final y único de tal alegación "fue y sigue siendo mantener la conservación y protección del edificio".
También han sumado que desde el año 1994 hasta la actualidad, Vinos Lázaro "ha realizado continuas inversiones en el edificio con la finalidad de mantenerlo en perfecto estado de conservación. Insistimos que nuestra única finalidad ha sido y es la conservación y protección de dicho edificio", han confesado.
A título informativo, y ante lo recogido en algunos medios de comunicación, también han hecho patente su intención de aclarar que en la actual ubicación del edificio familiar "no hay planificada ninguna calle", y han detallado que tal y como se recoge para el desarrollo de la unidad de normalización CH-2 con 'prioridad alta', es "necesaria la demolición" de las edificaciones asentadas en los número 3, 5 y 7 de la mencionada del plaza además de la calle Ferial, "con la finalidad de construir un único edificio".
Por ello, han urgido que "su desarrollo puede ser inminente según el 'Convenio Urbanístico' firmado con fecha 18 de julio de 2014 entre el Ayuntamiento de Soria y el propietario del solar de la Calle Ferial, para la 'cesión anticipada de una parcela calificada por el PGOU como sistema local viario Calle Ferial' ".
Por último y para concluir, han incidido en que la "única y exclusiva pretensión" de Vinos Lázaro es la del mantenimiento del inmueble "y conservar el sabor tradicional de un edificio, con casi 200 años de antigüedad, y una bodega con más de 80 años de historia, emblemática en la ciudad de Soria".
Cabe recordar que este negocio familiar emprendió hace diez días una campaña de recogida de firmas con el fin de sustentar el mantenimiento del edificio, que se encuentra "en perfecto estado" según los propietarios.