La procuradora en las Cortes regionales es despedida por centenares de personas en una multitudinaria ceremonia celebrada en la concatedral de San Pedro. Los asistentes coinciden en sus cualidades de servicio y de trabajo y en su gran calidad humana.
"Me quedo con tremenda calidad humana de Canto". Con estas palabras, y no sin emoción, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera ha lamentado en Soria la pérdida de la procuradora regional Canto Benito, que ha sido despedida en una solemne ceremonia en la concatedral de San Pedro. Un acto en el que la emoción y el respeto han predominado en los centenares de personas que han dado el último adiós esta médico zamorana pero soriana de adopción.
Herrera ha destacado que la procuradora popular tenía "una sonrisa que desarmaba siempre" en un gesto que reflejaba "la mejor disposición al encuentro y al acuerdo". El máximo dirigente regional ha resaltado también que Benito, que "disfrutó con sus trabajos" tanto en la medicina como también en el apartado de la política, y ha agradecido su labor en la reforma de las infraestructuras sanitarias de la región". "Fue una luchadora", tanto en el apartado político como también a la hora de afrontar una larga enfermedad que finalmente ha acabado con su vida.
Los elogios hacia esta mujer de 55 años también han sido pronunciados por el presidente del Parlamento Español, el soriano Jesús Posada, quien ha significado la vocación de servicio y la capacidad de trabajo de la aforada regional por Soria. Lo mismo ha hecho el vicepresidente del Senado, Juan José Lucas, quien ha señalado que Benito "participó con pasión en la política" y ha dado ánimos a la familia, especialmente a su marido, Sergio Barranco, a quien ha enviado el mensaje de cariño extensivo de todos los sorianos y del Partido Popular "que la llevan en el corazón".
Durante las exequias, oficiadas por el párroco de San Pedro, David Gonzalo, el presbítero ha incidido en que la procuradora "ha afrontado con tranquilidad el momento de su muerte" en una vida "coherente como cristiana ante los designios de Dios". También ha pedido a los presentes la oración hacia ella y también por sus familiares, para que estos encuentren "el consuelo y la firmeza ante el dolor" por esta pérdida. Gonzalo ha querido también sumar ánimos a los presentes diciendo que "los muertos no mueren del todo", y ha insistido en que la vida "tiene una prolongación más allá de la muerte".
En el epílogo de la celebración, Patxi Irigoyen, amigo personal de Canto Benito, se ha dirigido a los asistentes recordando "la sonrisa de buena gente" que prodigaba siempre la fallecida, y ha alabado su trayectoria lamentando que "la vida no premia a los grandes, los castiga", por lo que, de igual modo, ha invitado a llenar el vacío que este óbito ha dejado en la sociedad indicando que "nos hace falta gente buena y la tenemos que encontrar".
Las exequias han reunido a multitud de personalidades de la política nacional como de la provincial. El presidente de la Diputación, Antonio Pardo, el alcalde de Soria, Carlos Martínez Mínguez, además de regidores como José Antonio de Miguel, de Almazán, y aforados nacionales y regionales de diversos signos políticos han querido dar el último adiós a Canto Benito en un emotivo encuentro en donde su viudo, muy emocionado, ha sacado fuerzas de flaqueza en unos duros momentos para recibir el pésame de los presentes.
Los restos de Canto Benito serán incinerados en la intimidad familiar mañana martes. Descanse en paz.