Abogan por su ubicación en el casco urbano para evitar problemas técnicos, ambientales y económicos. La legislación, otro obstáculo.
El colectivo ASDEN Ecologistas en Acción ha mostrado su disconformidad a las previsiones municipales de construcción de un parque infantil de aventuras en Valonsadero.
Remitiéndose a la aprobación unánime del Pleno municipal el pasado día 11 y en el que se aceptaba la licitación de un proyecto para instalar o construir un parque de aventuras, rocódromo y un campo de minigolf en el monte de utilidad Pública de Valonsadero, con la ocupación de una superficie de dos hectáreas, entre el río Pedrajas y la Casa del Guarda.
La zona elegida para el estas instalaciones, han aducido en este colectivo, y así lo reconoce el Ayuntamiento en su tramitación, entra en conflicto con el cauce histórico del río y su inundabilidad ordinaria. "Esto va a suponer un riesgo, así como el previsible deterioro frecuente de las instalaciones por las avenidas", según las apreciaciones de los ecologistas, lo que supondrá "un coste añadido de reparación y mantenimiento, que no queda claro si va a ser asumido por el adjudicatario o por el erario público". Además, han significado que no se pueden adoptar medidas arquitectónicas para paliar este problema, ya que la Ley de Aguas establece la prohibición de instalar barreras u obstáculos a la laminación de las riadas.
También consideran otros aspectos, como el hecho de que se trate de una actividad privada que va a costar dinero a los usuarios, con cesión de espacio y aportación económica por parte del Ayuntamiento.
"Sin duda, muchos de los niños que solicitaron estas actuaciones esperaban poder acceder a ellos de modo libre", han observado también.
Por otra parte esta iniciativa recibe el consentimiento municipal precisamente cuando se está elaborando el proyecto de Ordenación y el programa de Uso Público del monte, "con lo cual se presenta como un hecho consumado para dicha planificación". Además, no han olvidado decir que Valonsadero es Zona Natural de Esparcimiento por Orden de la Consejería de Medioambiente/1082/2005, Bien de Interés Cultural y Lugar de Interés Geológico.
En términos de movilidad sostenible y de reducción de CO2, el colectivo se ha referido a que existe la Ley 7/2014, de 12 de septiembre, de medidas sobre rehabilitación, regeneración y renovación urbana, y sobre sostenibilidad, coordinación y simplificación en materia de urbanismo) que promueve la proximidad, a fin de reducir las necesidades de desplazamiento. "Paradójicamente", han continuado, "el Ayuntamiento de Soria obliga a usar el coche para disfrutar de un servicio recreativo y de ocio infantil".
También han subrayado que es importante, no sólo inaugurar atracciones infantiles, "sino mantener las que existen", ya que "el nivel de desarrollo de un país se mide no sólo por cuántas cosas nuevas hacen, sino también por cómo se cuida lo que ya tiene". Aquí han denunciado el estado de conservación de muchos de los parques infantiles de la ciudad, el cual "deja que desear, con columpios que permanecen rotos por largos períodos de tiempo y a veces hasta años", amén del rocódromo del parque en el polígono, el cual "está cada vez más degradado".
"Hay que hacer cosas, pero sobre todo hay que preservar las que hay. Si el Ayuntamiento de Soria quiere ser un ejemplo como pretende en para ser reserva de la Biosfera, debiera cuidar estos aspectos. Son menos glamurosos, ya que nadie inaugura un columpio arreglado, pero tanto o quizá son más importantes para el bienestar de los ciudadanos", han concluido.