Portada de 'A qué esperan los monos'


OPINIóN
Actualizado 26/01/2015 21:08:47
Desde las primeras páginas uno se siente sumergido en una historia llena de misterio, de esas que atrapan y se van desgranando con lentitud, exiguiéndote una paciencia que consigue que la lectura se acompase con imágenes claras y concisas del entorno en que suceden los acontecimientos

Cualquier anuncio de una nueva novela de Yasmina Khadra suelo recibirlo con la alegría de una agradable lectura, aunque con la incógnita de si esta seguirá estando a la altura de las anteriores. No puedo evitar sentir ese miedo a que se rompa el encanto de aquellos autores que siempre me han ofrecido una buena obra, por eso no suele resultar extraño que sus nuevos trabajos pasen meses apilados esperando el momento oportuno para ser leídos.

La espera esta vez no ha sido larga, había algo en la novela que me atraía con un magnetismo especial, no sé si el título o la sensación de volver a leer una novela de intriga con tintes policíacos. Sí, desde las primeras páginas uno se siente sumergido en una historia llena de misterio, de esas que atrapan y se van desgranando con lentitud, exiguiéndote una paciencia que consigue que la lectura se acompase con imágenes claras y concisas del entorno en que suceden los acontecimientos. Pero hay algo que la hace diferente, que te demuestra que Yasmina Khadra (pseudónimo de Mohamed Moulessehoul) escribe de forma diferente, que sus libros siempre aportan algo más que un simple entretenimiento.

A qué esperan los monos... como prácticamente todas sus novelas anteriores tiene mucho de denuncia. Sí, claro que es una novela de ficción y tan bien escrita que el lector queda atrapado desde el inicio, pero antes que señalarla como novela negra, género al que parece pertenecer, sería más fácil enclavarla dentro del género de la novela política ya que a lo largo de sus páginas el autor dedica sus esfuerzos en denunciar la corrupción existente en Argelia. Una corrupción que parece atrapar todo el sistema del país norteafricano y que abarca los ámbitos más variopintos como el económico, el político, e incluso el religioso.

Con la precisión que le caracteriza Khadra convierte cada página en un fresco en el que aparece dibujada una parte de la sociedad argelina, construyendo una historia tan real que hay momentos en los que parece estés leyendo una noticia veraz, hasta tal punto que pasas la página esperando descubrir una entrevista que aclare lo que hasta el momento ha sucedido. Logra, además, crear la tensión suficiente para que toda tu atención se centre en lo que en ese momento se está narrando, aunque sin poder evitar que cientos de imágenes aparezcan en tu mente intentando completar el puzzle cuyas piezas van apareciendo tras cada palabra.

Una novela inquietante, de lectura ágil y con sorprendentes giros que ponen a prueba la pericia del lector para atar los cabos a la misma velocidad con que son narrados. Una lectura para mirar a ambos lados y comprobar que todo está como tú lo imaginabas antes de ponerte a leer.

Otras obras de Yasmina Khadra:

Morituri (1997), Los corderos del señor (1998), Doble blanco (1998), El otoño de las quimeras (1998), Lo que sueñan los lobos (1999), El escritor (2001), Las golondrinas de Kabul (2002), Trilogía de Argel (2002), La prima K (2003), La parte del muerto (2004), El atentado (2005), Las sirenas de Bagdad (2006), Lo que el día le debe a la noche (2008), La ecuación de la vida (2012), Los ángeles mueren por nuestras heridas (2013).

Blog de César Millán

Leer comentarios
  1. >SoriaNoticias
  2. >Opinión
  3. >'A qué esperan los monos' de Yasmina Khadra