El uso hipnosedantes en Castilla y León se sitúa por debajo de la media nacional.
Una encuesta realizada por la Consejería de Familia e Igualdad encuesta confirma el descenso del consumo del tabaco en Castilla y León, que ha pasado a situarse en el 39% frente al 42% de hace cuatro años. A nivel nacional esta tendencia también se mantiene, si bien con consumos algo superiores a la Comunidad (41% y 43%). Prevalece el consumo del hombre frente al de la mujer, en ambos casos.
Los hipnosedantes y el cannabis forman el segundo bloque de sustancias más consumidas, con prevalencias bastante alejadas de las anteriores. El consumo de hipnosedantes es en Castilla y León del 10,8%, inferior al 12,2 % a nivel nacional. En términos generales se aprecia, como a nivel nacional, una tendencia creciente con una prevalencia del consumo de la mujer, que duplica el consumo de los hombres. Las diferencias además, según la encuesta, aumentan con la edad.
En relación al cannabis, las prevalencias de consumo descienden ligeramente tanto en Castilla y León como a nivel nacional, observándose en la Comunidad consumos inferiores. Los datos de la última encuesta dan para Castilla y León un 6,1 % de consumos en los últimos doce meses, frente al 9,2 % a nivel nacional. Los hombres consumen en mayor proporción que las mujeres en todos los grupos de edad.
El resto de sustancias (cocaína, anfetaminas, éxtasis, alucinógenos, heroína, inhalables volátiles, etc.) tienen unos niveles de consumos muy bajos, prácticamente testimoniales, inferiores al 1%, y siempre por debajo de los valores nacionales. El consumo está estabilizado. Las denominadas 'nuevas sustancias' son prácticamente anecdóticas en Castilla y León, consumo experimental entre 25 y 34 años. De hecho, el 75% de la población nunca ha oído hablar de ellas.
La consejera también ha indicado que los datos de la encuesta indican que la población en general percibe un alto riesgo en el consumo de drogas, la percepción es mayor en las mujeres que en los hombres, sin embargo alerta sobre la baja percepción del riesgo en el consumo del alcohol y el cannabis. La población considera el tabaco más peligroso que el alcohol y que el cannabis.