PROVINCIA
Actualizado 04/09/2015 09:42:46

La ASRD pone en conocimiento de las autoridades este acto en el monumento ubicado en el término sampedrano a dos asesinados en la Guerra Civil.

Coincidiendo con los 79 años del asesinato en Fuentebella de los personas civiles, Antonio Cabrero Santamaría y Valentín Llorente Benito, alcalde de Pitillas el primero, y maestro de Igea el segundo, de 32 y 28 años respectivamente, la Asociación Recuerdo y Dignidad (ASRD), interponía este jueves una denuncia por la ruptura y desaparición de la placa que les recuerda en el monolito situado en la sierra de San Pedro Manrique.

La denuncia se comunicaba en la Comandancia de la Guardia Civil de Soria, para que una vez ahí se le dé traslado a la de San Pedro Manrique. Así mismo han sido entregadas en la Subdelegación de Gobierno de Soria tres solicitudes de investigación de los hechos para la propia Subdelegación, la Delegación Territorial y el Ayuntamiento de sampedrano.

En dichos documentos se solicita además una condena pública e inequívoca de los hechos, ya que en la ASRD consideran que junto al robo en sí, el acto es un atentado contra un patrimonio que refleja el sentir de una familia que jamás ha dejado de buscarlos y una comarca que, en el acto de colocación del monolito, dejó ver su pesar por los asesinatos.

Como se recordará, en dicho acto, descendientes del despoblado de Fuentebella participaron activamente junto a la familia interviniendo en señal de reconciliación. Según han explicado en la agrupación, la importancia sentimental llega hasta el punto de que, al no haberse localizado los cuerpos en diferentes recogidas de testimonios, descensos al cruce de barrancos, catas, búsquedas, etc., el último deseo del hijo de Antonio Cabrero ha sido que lancen sus cenizas al barranco donde asesinaron a su padre.

Todo el proceso en el que han intervenido las familias y las asociaciones Recuerdo y Dignidad, La Barranca, Ahaztuak 1936-1977 se han realizado con el máximo respeto a los vecinos y con eterno agradecimiento a cada persona que ha brindado su ayuda.

Según testimonios que ha podido recoger la ASRD, la placa fue arrancada hace aproximadamente un año. La ubicación del monolito y sus dimensiones lo hacen difícilmente localizable para quien no transite mucho por esa zona o no sepa su localización exacta. Además, hizo falta alguna herramienta poco usual para extraerla, ya que las cabezas de los tornillos estaban desgastados y la placa adherida con poliuretano a la piedra. Dentro de unos días, miembros de la asociación subirán junto a las familias a colocar una nueva placa. Un acto que se llevará a cabo cada una de las ocasiones que sea violada la memoria de estas dos personas.

La historia de estos dos desaparecidos se recoge en el libro 'La Vara de laLibertad', de Isabel Goig Soler

Leer comentarios
  1. >SoriaNoticias
  2. >Provincia
  3. >Denuncian la desaparición de una placa memoria de fusilados