La VII edición del Premio Nacional de Educación para el Desarrollo Vicente Ferrer ha destacado 15 proyectos educativos de toda España, de los cuales cinco son de Castilla y León. Este galardón premia la labor solidaria y de sensibilización de centros educativos que fomentan el espíritu crítico de sus alumnos y su participación en actividades que promuevan la consecución de una ciudadanía solidaria.
Profesores y alumnos de estos centros educativos de la Comunidad han asistido hoy, en Madrid, al acto de entrega de estos premios. Son numerosas las iniciativas y los proyectos que han desarrollado los centros docentes en este ámbito, por lo que este tipo de reconocimientos contribuyen a dar a conocer su contenido y así servir de referencia a otras comunidades educativas. La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de la Presidencia, continúa apoyando el trabajo que se realiza desde la red de centros educativos de Castilla y León. En total, son diez los premiados en las siete ediciones de estos premios nacionales y 18 los que han recibido una subvención de la Consejería de la Presidencia que les permite financiar las actividades y proyectos. Esta línea de ayudas se convocará por tercera ocasión en noviembre de este año.
La Educación para el Desarrollo debe favorecer el conocimiento de las realidades y las causas y consecuencias de la pobreza y la desigualdad en la sociedad y contribuye a promover valores relacionados con la solidaridad, la justicia social, la búsqueda de vías de acción para alcanzar el desarrollo humano y fortalecer actitudes críticas y comprometidas con estas causas. Para la Junta de Castilla y León la Educación para el Desarrollo es una pieza fundamental en el engranaje de la política de cooperación internacional, ya que constituye el trabajo de fondo necesario para promover en la sociedad la solidaridad, la corresponsabilidad y el compromiso de la ciudadanía en un marco global. Por este motivo, la Consejería de la Presidencia celebra anualmente un encuentro de docentes para el desarrollo al que asisten los profesores de centros educativos que quieran introducir esta materia en sus centros.
En esta misma línea, la consejería celebra también una jornada anual de buenas prácticas con alumnos de centros escolares cuyo objetivo principal es intercambiar experiencias adquiridas en esta materia durante el curso escolar. Así, los participantes explican a sus compañeros de otros centros sus proyectos en temas como la lucha contra la pobreza, la solidaridad, las relaciones interculturales, los aspectos de responsabilidad social ciudadana y la sostenibilidad medioambiental, entre otros.
Otras de las actividades que se organizan desde la Consejería de la Presidencia, en la misma línea que las anteriores, son dos convocatorias dirigidas a la promoción del voluntariado en cooperación para el desarrollo, los programas de formación especializada dirigidos a los agentes de cooperación para el desarrollo, así como acciones de información y sensibilización como exposiciones y encuentros. La Junta de Castilla y León pretende apoyar las propuestas pedagógicas destinadas a sensibilizar, desarrollar el espíritu crítico, y fomentar la participación activa del alumnado en la consecución de una ciudadanía global, comprometida con la erradicación de la pobreza y con el desarrollo humano y sostenible.