Responsables de ambas entidades asistenciales muestran la problemática de las enfermedades mentales en la celebración mundial de estas dolencias.
Adelantando la fecha del Día Mundial de la Salud Mental, (10 de octubre) las entidades Asovica y Fadess han salido nuevamente a la calle para dar cuenta de las actividades asistenciales que llevan a cabo cada año para el centenar y medio de beneficiarios que atienden, tanto en la capital como en la provincia.
Una iniciativa en la que buscan informar sobre la necesidad de obtener una mayor financiación para dar cobertura a sus necesidades que pasan ante todo por la inserción laboral de las personas a las que atienden. Este año han abordado un proyecto nuevo y en el que se busca trabajo en empresas normalizadas, fuera de los dos centros especiales de empleo que mantienen en Soria. "Intentamos crecer y dar un mayor número de puestos de trabajo, pero no damos para más", ha explicado Natalia Briongos, coordinadora de Asovica, quien además ha avanzado que se están gestionando dos cafeterías con personas que sufren este tipo de dolencias.
También se está comenzado a dar trabajo en el sector de la jardinería y en lavandería, "pero echamos en falta un mayor aporte económico para poder seguir adelante", ha concluido Briongos, quien ha comentado igualmente el esfuerzo que brindan los cerca de 600 asociados en toda la provincia.