Un descenso que no se produce al ritmo deseado de los empresarios. Lamentan la caída de la población activa y la despoblación, "lastres" para la recuperación económica.
La Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) ha lamentado que los datos publicados por el Instituto Nacional de Empleo (INE) sobre la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al cuarto trimestre de 2015 reflejen en la provincia un incremento en 500 personas respecto al tercer trimestre del pasado año.
En la comparativa trimestral, las cifras no siguen la estela de los registrados a nivel nacional en los que las estadísticas recogen 71.300 parados menos en España.
En la comparativa interanual consideran que las cifras son positivas también para la provincia dado que en el cuarto trimestre de 2015 la tasa de paro es del 13,3% con 5.600 desempleados mientras que en el cuarto trimestre de 2014 la tasa de paro era del 16,96% con 7.400 parados.
En este sentido han remarcado que se continúa frenando de forma gradual la destrucción de empleo en Soria, "lo cual es positivo, pero no al ritmo deseado", han indicado fuentes de la agrupación. Por otro lado, y lamentablemente como dato negativo, la tasa de actividad del último trimestre de 2015 se sitúa en la provincia en el 54,70 %, "lo que supone una caída respecto al último trimestre de 2014, en el que la tasa de actividad era del 56,15%".
"Las peculiaridades de nuestra provincia, el descenso de la población activa y la permanente sangría despoblacional que sufrimos, lastran estructuralmente la recuperación económica de nuestra tierra" hna indicado en FOES. De igual modo, han insistido una vez más en la necesidad de adoptar medidas dinamizadoras diferentes y específicas, "acordes a nuestra provincia que contribuyan a incentivar la actividad empresarial para aumentar los niveles de ocupación".
En este sentido, ha repetido que es imprescindible apostar por las empresas y por los empresarios "como auténticos generadores de riqueza y empleo" ya que sigue habiendo "un amplio recorrido en la mejora de la fiscalidad, de los costes sociales, del acceso a la financiación, de los incentivos a la contratación, de la generación de empleo de calidad así como en la reducción de la morosidad y de las cargas administrativas".
De igual manera consideran que es preciso intensificar los esfuerzos en el control del gasto público y en racionalizarlo hacia inversiones productivas que generen actividad y empleo. "Queda todavía camino por recorrer para que la situación del mercado laboral alcance los niveles previos a la crisis porque desgraciadamente no se crean puestos de trabajo al mismo ritmo que se han venido destruyendo en los últimos años", han concluido.