Tuvo que sufrir más de la cuenta el Río Duero San José para superar por 3-1 a un combativo C.V. Mediterráneo, en el pabellón de Los Pajaritos, ante unos 600 espectadores en las gradas. Los parciales, 25-19, 21-25, 25-11 y 31-29 muestran la dificultad que tuvieron los sorianos, sobre todo en el cuarto parcial para acabar sumando los tres puntos en juego.
Y es que de salida el equipo soriano no pudo contar con Manuel Sevillano, lesionado el jueves con un esguince de tobillo. Su lugar lo ocupó de primeras Álex Martínez, quien junto a Álvaro Hernández y Carlos Jiménez fueron los responsables de la recepción celeste a la cual le costó entrar en juego, por lo que durante buena parte del set el marcador se mantuvo igualado. No fue hasta los instantes finales cuando el Río Duero San José consiguió despegarse en el marcador con un parcial de 8-2 para acabar ganando por 25-19.
La segunda manga fue diferente, los castellonenses apretaron más con el saque y fueron ellos los que comandaron casi siempre el marcador, hasta que casi a punto de finalizar el set los sorianos consiguieron igualar el luminoso. Pero unas buenas elecciones en el ataque dieron a los visitantes el parcial por 21-25. Para entonces Carlos Jiménez ya está siendo el jugador más determinante de su equipo.
En la tercera manga Sevillano cambió el equipo. Salvador pasó a la recepción y entró en cancha Luis Martín como opuesto. El equipo salió lanzado desde el principio y los puntos fueron cayendo rápidamente de su lado logrando cerrar la manga con un espectacular 25-11.
Pero C.V. Mediterráneo no había dicho la última palabra y se aferró a la cancha en la cuarta manga que fue la más emocionante de todas. Con varias ventajas de dos o tres puntos los levantinos veían la posibilidad de sumar algún punto en Soria, máxime cuando llegaron con esa ventaja a los puntos finales, después de Soria hubiera desperdiciado un 18-15. Con 21-23 parecían tener el tie break a un paso, pero los de Sevillano apretaron y consiguieron igualar a 24 y de aquí al final se sucedieron las ventajas para uno y otro equipo siendo un error en el remate de los visitantes el que diera el definitivo 31-29 al Río Duero.