La abogada Francisca Sauquillo ha pedido solucionar la falta de solidaridad con las personas que llegan a Europa huyendo de las cárceles o perseguidos por las guerras y la intolerancia, porque de lo contrario "Europa está en peligro".
Sauquillo ha recogido hoy la segunda edición del Premio por las Libertades Luis Cabrejas, concedido por la Agrupación Local del PSOE de Soria por su lucha por los derechos humanos y por las libertades públicas.
"Estamos haciendo un muro de separación, que en su día nos parecía horroroso y conseguimos tirarlo, el muro de Berlín, y ahora está habiendo un muro con aquellos que reclaman el derecho de asilo y no lo estamos cumpliendo", ha denunciado a los periodistas.
La letrada, que toma el relevo en este premio al actual presidente de la Cámar Baja, Patxi López, ha pedido cumplir la declaración de derechos humanos porque "desgraciadamente sigue habiendo mucha violación de los mismos en todas las esferas de la sociedad".
Además ha subrayado que Europa. "la defensora del Estado del bienestar", ha retrocedido en la defensa de los derechos humanos.
La abogada ha señalado que Europa se planteó sobre los pilares de la cohesión, del Estado del bienestar y de la solidaridad.
"Se están cargando muchísimo exiliados en países muy pequeños, que están en crisis como el problema de Grecia e Italia, los que están recibiendo más, pero no tenemos en cuenta que otros países fronterizos con Siria, como Libano y Jordania, tienen un porcentaje de población refugiada o axilada muy fuerte", ha subrayado.
Además ha recordado que cuando la guerra de Bosnia parecía que Europa reaccionaba en esta materia y ahora no lo está haciendo ante un drama como el que hay.
En su opinión, la solución no pasa sólo por el dinero sino por tener voluntad política y, en este sentido, ha criticado el acuerdo adoptado por Europa con Turquia.
"El hacer diferencias entre asilados sirios y los de otras nacionalidades no es posible mantenerlo", ha apuntado.
Sauquillo ha pedido al nuevo Gobierno español que estudie este asunto como importante, porque de él dependerá la situación de Europa, que fue promotora en su día de la ley de asilo.
Además ha declarado que España mantiene actualmente unas desigualdades que no se las puede permitir y "no vale la tapadera de la crisis", porque en los años 90 también la había y, sin embargo, recogieron a 5.000 refugiados del conflicto de Yugoslavia.
Por último ha reconocido que los asuntos que más le han marcado en su carrera profesional ha sido la defensa de los afectados por el síndrome tóxico y la defensa de las últimas ejecuciones en España en 1975.