De este modo, la cifra definitiva queda fijada en 4,3 M?, lo que confirma la "buena situación financiera" del Ayuntamiento.
La ejecución del presupuesto del Ayuntamiento de El Burgo de Osma en el pasado ejercicio 2015 fue del 83,77 %. El presupuesto definitivo de dicho ejercicio se fijó de este modo en 4.367.000 euros, pues a los 4 millones aprobados por el Pleno de la Corporación se sumaron modificaciones presupuestarias por valor de 367.000 euros a lo largo de la anualidad. Las obligaciones reconocidas netas fueron de 3.658.143 euros, con lo que la suma total asciende definitivamente a la cifra mencionada.
De la liquidación del año pasado se desprende también que los derechos reconocidos netos, es decir, los recursos que se han obtenido en el ejercicio liquidado, son de 4.404.030 euros, esto es, superiores a la previsión presupuestaria de los 4.367.000 euros. La ratio de los derechos reconocidos es del 100,85 %, "lo que indica la prudencia estimativa a la hora de elaborar los presupuestos", según han señalado fuentes municipales.
También han indicado que el estado de liquidación del presupuesto pone de manifiesto cómo se ha ejecutado el mismo y es un documento que sirve para conocer la gestión de los ingresos y gastos realizados durante el año, al plasmar las obligaciones de pago y derechos de cobro que se hayan reconocido en el ejercicio.
El alcalde, Jesús Alonso, ha valorado muy positivamente estos datos que confirman "la buena gestión realizada por el Ayuntamiento, la buena administración de los recursos públicos y la buena salud financiera municipal", declaraba así mismo que "estas cifras no son fríos números, sino el reflejo de una situación determinada, pues los datos evidencian realidades concretas, mensurables y cuantificables: nos enseñan la realidad".
El regidor edil burgense ha enlazado los buenos porcentajes del ejercicio económico de 2015 con los que hace unos días se daban a conocer, procedentes del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, en los que se ponía de manifiesto que los vecinos de la Villa Episcopal soportan una presión fiscal mucho menor a la media y reciben unos servicios de mayor calidad por los que pagan menos tasas.