Con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra este domingo 5 de junio, CSIF exige que se considere parte de un servicio esencial a los 2.400 trabajadores de la Junta de Castilla y León que trabajan en aspectos relacionados con medio ambiente.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) reclama condiciones laborales dignas, refuerzos de plantillas, y el reconocimiento de servicio público esencial para los profesionales de Medio Ambiente, coincidiendo con la celebración del Día Mundial de Medio Ambiente, en un momento en el que los recortes de los últimos años han hecho mella en un servicio público fundamental.
La Ley de Protección Ciudadana de Castilla y León reconoce los incendios forestales como materia de servicio esencial, pero desde CSIF se comprueba a diario la "desconsideración que se tiene con los empleados públicos que trabajan en ellos".
CSIF recuerda que España cuenta, posiblemente, con el patrimonio natural más importante y diverso de Europa, puesto que la mitad de la superficie de España son masas forestales (públicas la gran mayoría), que se complementan en biodiversidad con valiosos ecosistemas acuáticos y espacios naturales con alguna figura de protección (Red Natura 2000), en muchos de los casos.
Esta trascendencia del patrimonio natural se agranda aún más en comunidades de interior como Castilla y León, donde la naturaleza y el medio rural son recursos esenciales para su desarrollo social y económico. "Una realidad que entraña muchas oportunidades y también riesgos, como el de los incendios forestales, los vertidos, o las inundaciones", apunta CSIF.
Por ello, este sindicato independiente afirma que "es triste recordar que la dedicación, sacrificio y vocación de servicio público de quienes pelean por el medio ambiente de todos, no se reflejan en las circunstancias en las que cada día desarrollan su trabajo, simplemente porque están dejando extinguir a cuerpos y categorías, igual que pasa con infinidad de empleados públicos que no se consideran de servicios esenciales, cuando desde CSIF creemos que sí lo son".
La prevención de todos estos riesgos y la lucha contra ellos "es responsabilidad de las administraciones públicas, de las que dependen agentes forestales y medioambientales, bomberos forestales que ni siquiera tienen reconocida la categoría laboral y trabajan solo en verano, y un largo etcétera de profesionales cualificados, como celadores de medio ambiente, ingenieros forestales y de montes o biólogos, que no tienen el reconocimiento, la puesta en valor y las condiciones laborales de los profesionales que sí tienen en otros sectores, como Sanidad, Educación o colectivos del Estado que prácticamente no tiene competencias en medio ambiente, pero sí disponen de excelentes gabinetes de comunicación", lamenta CSIF.
"Es necesario, y por ello lo exigimos, una tasa de reposición del 100% de todos los colectivos que intervienen en medio ambiente, que se elimine la temporalidad y precariedad que soportan, o la creación de la segunda actividad. También se tiene que reconocer la categoría profesional de bombero forestal, con todo lo que ello implica, y debe trabajar todo el año. Cuestiones que defenderemos en la negociación del convenio laboral con la Junta", concluye CSIF.