Un inquilino comprueba que tras su ausencia la habitación que tenía alquilada estaba ocupada por otra persona, por lo que ha cursado denuncia al propietario.
Los viandantes que pasado el mediodía de este jueves atravesaban la calle Zapatería en las inmediaciones de la plaza Fuente Cabrejas se han visto sorprendidos, al igual que el vecindario, por la presencia policial en esta zona de la ciudad.
Tres dotaciones policiales (de ellas del Cuerpo Nacional y otra del municipio) acudían a apaciguar los ánimos de un vecino que había estado ausente un tiempo de una habitación que había alquilado en una vivienda de la calle Zapatería y a su regreso comprobaba que se había cambiado la cerradura del inmueble y la estancia estaba ocupada por otro inquilino.
El hombre, pasado un escaso margen de tiempo, volvía al piso, que en ese momento se encontraba abierto y lanzaba las pertenencias del nuevo inquilino a la calle, lo que llevaba a los agentes a mediar en el asunto.
Finalmente, el primer arrendatario cursaba una denuncia en la Comisaría hacia el dueño de la vivienda por estos hechos.
El caso ahora se encuentra en los juzgados donde la ley dirimirá sobre este asunto.