Incertidumbre es la sensación que Estela Navascués experimenta a pocos días de su participación en la prueba de maratón de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. La climatología y sobretodo la humedad es lo que más preocupa a la atleta navarra afincada en Soria, que cumplirá su sueño el próximo 14 de agosto en la ciudad brasileña.
Sin ningún puesto concreto en mente, Navascués tiene como objetivo mantener su marca personal para poder entrar en meta entre las 30 primeras. Un resultado difícil, pero no imposible de conseguir, ya que la maratoniana va con muchas ganas de dar lo mejor de sí misma. Entre las rivales más fuertes se encuentran las atletas etíopes y las portuguesas, que como ha explicado la tudelana tienen un nivel muy alto en esta prueba.
La atleta de 35 años dio el salto a la prueba de maratón con 25, una edad demasiado temprana para esta modalidad que necesita de mucha experiencia. Tras varios reveses y no obtener los resultados que buscaba, la maratonista se ha demostrado así misma que vale para ello, consiguiendo en el Maratón de Sevilla, celebrado este año, la mínima olímpica para participar en los Juegos de Río. Un triunfo que se antepone al resto por la especial importancia que tiene para su carrera, haciéndole conseguir la meta que se había marcado profesionalmente y alcanzando lo que para la deportista es la cumbre. Un sueño que se hace realidad tras pasar por momentos difíciles como la lesión que le impidió participar en el maratón del Campeonato Europeo de Zúrich en 2014. Un pase que consiguió gracias a su mejor marca hasta el momento (2h32'38") y que la convirtió en campeona de España de Maratón en San Sebastián el año 2013.
Esta temporada está resultando especialmente dura para Navascués por la exigencia de la competición a nivel mundial, una etapa que finaliza este mes, puesto que la atleta piensa tomarse un tiempo de relax tras los Juegos Olímpicos. Un parón para descansar tanto física como mentalmente y así poder cumplir su deseo de ser madre. Según ha comentado todavía no tiene claro si para siempre o no, ya que deja abierta la puerta a los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020.
LOS INICIOS
Estela Navascués llegó a Soria en el año 2003, justo cuando comenzaba su andadura el CAEP Soria. Acostumbrada a entrenar en Tudela decidió salir de su ciudad natal con el objetivo de mejorar al lado de su primer entrenador en la ciudad, Enrique Pascual Oliva.
Comenzó compitiendo en pruebas de 5.000 y de 10.000 metros, además de participar también en pruebas de 10 kilómetros Ruta, obteniendo en todas las modalidades muy buenos resultados. La media maratón era una competición en la que Navascués se veía bien y fue aproximadamente en el año 2006 cuando decidió dar el salto al maratón. En ese momento la atleta comenzó a entrenar con Abel Antón, principalmente por la experiencia que el soriano tiene en este tipo de prueba.
LA PREPARACIÓN
La deportista lleva muchos meses de dura preparación con entrenamientos bajo temperaturas más altas que las que se va a encontrar en Río (entre los 19 y 25 grados), para de esta forma simular el clima de la ciudad brasileña, con mucha humedad. Por lo demás, la maratoniana ha comentado que la preparación está siendo como siempre, ya que ha funcionando hasta el momento muy bien.
Los lugares escogidos para su preparación son la Junta de los Ríos y en pretemporada Valonsadero por la dureza del terreno.
No solo los entrenamientos diarios entran en la preparación de la deportista, la dieta que sigue, elaborada por un nutricionista, es muy estricta, pero también necesaria para poder alcanzar sus metas.
Además, Navascués aprovecha la experiencia de su entrenador, Abel Antón, que le aconseja sobre los posibles percances que puede tener durante la prueba, como el vivido por el bicampeón en uno de los juegos, cuando un atleta keniata le arrebató el avituallamiento.
AGRADECIMIENTOS
La atleta navarra afincada en Soria ha querido agradecer todo el apoyo que ha tenido durante todo este tiempo antes de partir a Río el próximo 4 de agosto. La deportista ha mostrado su gratitud especialmente al CAEP Soria, a la Caja Rural, al Ayuntamiento de la ciudad, a Soria Natural, a Infisport, a Lurbel y a su club, New Balance Team, gracias al que la atleta puede entrenar en las mejores condiciones .