El firme no tuvo que ver "absolutamente nada" con el siniestro ya que el tramo está en buenas condiciones. La pericia del conductor del transporte de viajeros evitó una tragedia de consecuencias aún mayores.
Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Soria han negado que el estado del firme en el tramo de la A-15 donde ayer se producía un accidente entre un camión y un autobús de línea y que se saldaba con una persona fallecida "no tienen que ver absolutamente nada".
Estas mismas fuentes han señalado que precisamente este tramo, y tal y como comprobaban los propios medios de comunicación que debieron efectuar un recorrido por la calzada de dos kilómetros a pie debido al embotellamiento producido, no existen baches en dicho trazado.
En este mismo sentido, han apuntado a que el Ministerio de Fomento lleva seis años reclamando a Dragados, la empresa constructora, la subsanación de badenes originados tras las obras hace seis años. Por ello, en esta zona hay instaladas señales de límite de velocidad a 100 kilómetros por hora, con el color amarillo que las distingue, pese a que concretamente, tanto en el punto del accidente como en distancias anteriores y posteriores, el asfalto está en condiciones albergar velocidades habilitadas para autovía -120 km/hora-.
Según el atestado, el camión circulaba a una velocidad inferior a los 30 kilómetros a la hora por fallo mecánico que le hizo perder potencia, algo que no percibió el chófer del autobús, por lo que tras el primer impacto realizó con pericia, y a lo largo de 80 metros, una maniobra de emergencia que hizo que el vehículo se mantuviese en pie sin llegar a volcar. Algo que hizo que la tragedia no alcanzase un grado mayor que la registrada.
El camión, con matrícula española, iba conducido por un ciudadano búlgaro de 45 años y al volante del autobús iba un español de 53. Ambos dieron negativo en el examen de alcohol y drogas, según han reseñado fuentes oficiales.
De hecho, el conductor de este segundo vehículo era ayudado por los servicios asistenciales por una crisis de ansiedad causada por el accidente instantes después del mismo.
Señalar por último que las diligencias sobre el siniestro están siendo instruidas por el Juzgado de Instrucción de Almazán.