Los ecologistas de ASDEN vuelven a reclamar a las administraciones medidas para que eviten este tipo de hechos, que se vienen sucediendo reiteradamente en los últimos meses.
Las aguas del Duero a su paso por la ciudad de Soria presentan en los últimos meses unas características que están llamando la atención de los numerosos paseantes. Según ASDEN Ecologistas en Acción, en algunos casos estos derramos son difíciles de asociar a vertidos contaminantes ilegales que en su caso pueden proceder de aguas arriba de la ciudad. En otros, "no hay dudas de su elevada carga contaminante, ilegalidad y procedencia, como fue el caso del vertido del Lunes las Bailas, el de aguas fecales del 1 de septiembre y el de la depuradora [EDAR] de Soria del 25 de septiembre, con abundantes elementos celulósicos", han recordado.
En el colectivo han indicado que en la EDAR de la capital se observa con gran frecuencia que hay vertidos que "por su aspecto, color y olor se salen de lo que sería un vertido autorizado". Y así lo confirmaban varios vecinos ayer miércoles, en torno a las 13:30 horas, "quienes veían cómo del desagüe de la EDAR salía un líquido negro que contrastaba con el color del vertido normal".
Para ASDEN, aunque se pueda alegar que es un derrame puntual, y en su caso derivado de un fallo en los procesos o maquinaria de depuración, "la frecuencia con que se producen estos vertidos parece indicar que hay una serie de deficiencias o mal funcionamiento de las instalaciones". Algo que "difícilmente puede ser justificable".
De ser así, han apuntado a tres administraciones que deben de tomar cartas en el asunto, con la adopción de "medidas investigadoras, de control y de sanción". Por un lado la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) "en el caso de que el vertido supere los parámetros autorizados"; la Junta de Castilla y León, "por posible incumplimiento de la autorización ambiental de los procesos de depuración que son origen del vertido", y el Ayuntamiento de Soria "porque presuntamente la empresa adjudicataria no cumple con las condiciones del contrato".
Sin embargo, los ecologistas aducen que la Junta "dice que es incompetente, como fue su respuesta en los vertidos de la EDAR del 25 de septiembre; "y la CHD no se entera o no se quiere enterar de lo que pasa en los ríos, y así lo ha demostrado en las cercanas obras presuntamente ilegales que hay junto al desagüe de la EDAR".
Y en lo referente al Ayuntamiento, "a pesar de que cobra a los vecinos por un volumen de agua que no consumen y que no se depura, se despreocupa de invertir ese exceso de cobro en solucionar los problemas de la obsoleta depuradora y sólo presta atención a propuestas atractivas electoralmente como es la senda de Soria a Los Rábanos que es contradictoria con el mal estado del río Duero".