Ir al colegio en Bigene no es fácil. Los niños de este sector, situado en la región de Cacheu de Guinea Bissau, tienen que recorrer cada día hasta 12 kilómetros a pie para llegar a alguno de los centros escolares de la población africana. Muchas veces descalzos y cargando entre sus brazos sillas para poder tener un lugar en el que sentarse en la escuela.
Un arduo camino que desde la ONG Tierra sin Males y el bisauguineano afincado en Soria, Buba Camara, pretenden mejorar gracias al desarrollo de varios proyectos que AFABU (Asociação de Filhios e Amigos de Bigene Unidos) tiene pensados para la región.
En Bigene, 56.000 personas luchan a diario por sobrevivir. Las infraestructuras, la sanidad y la educación del sector (algo así como nuestras provincias) se lo ponen difícil, y aunque con estos proyectos no se solucionen todos los problemas, lo que se pretende es paliar las necesidades de sus habitantes y hacerles más llevadera su estancia en este mundo, en el que cada día crece más la desigualdad social.
Buba Camara ha vivido en sus propias carnes estas penalidades. El bisauguineano recuerda como durante su infancia "tenía que recoger palos y cañas de bambú para fabricar los asientos y pupitres de la escuela", y a pesar de llevar fuera de su país desde el año 1996, no se olvida de sus raíces y pretende desde España, y con ayuda de los sorianos, mejorar las circunstancias de los habitantes de Bigene, entre ellos, su madre y hermanos. Así unen dos 'provincias' con muchos puntos en común, ambas zonas rurales y con una población de menos de 100.000 habitantes.
LOS PROYECTOS
Buba tocó la puerta de Tierra Sin Males en 2015, la ONG que conoce desde el año 2000 y que le ayudó en su integración en Soria. Su propuesta, el desarrollo de varios proyectos para Bigene, su tierra natal, que en pleno siglo XXI todavía no cuenta con un hospital.
El presidente de Tierra sin Males, Eduardo Lallana, recibió su petición con los brazos abiertos, y comenzó con la ONG la maduración de estos proyectos para poder optar a las subvenciones de cooperación de las administraciones españolas.
El 14 de enero se dio el primer paso de Sorianos Solidarios con la apertura de la campaña 'Tu bici va al cole en Bigene'. Un aperitivo de los proyectos que AFABU y la ONG soriana tienen en mente en materia sobre todo de educación y sanidad.
Durante la primera etapa de esta misión, que se alargará hasta el 28 de febrero, pretenden conseguir alrededor de 100 bicicletas, que irán destinadas a los más pequeños de Bigene para que puedan desplazarse hasta el colegio con ellas. El comienzo ha sido ilusionante gracias a que la Asociación de Ciclistas Profesionales donará alrededor de 40 bicicletas, lo que supone "un gran empujón" para la campaña.
Desde Tierra sin Males quieren que la relación entre los niños de allí y los sorianos sea más afectiva y emocional, por eso, en la página web del proyecto,
bicisbigene.com, aparecen las fotografías de los chicos que recibirán las bicicletas, pudiendo elegir desde España a quién realizar la donación.
Las bicis se pueden entregar en diferentes puntos de la capital y la provincia, y permanecerán en un espacio del almacén municipal del Ayuntamiento hasta el fin de la campaña. Además, no hace falta que estén en perfecto estado porque el taller de reinserción de Cruz Roja se encargará de las reparaciones, cumpliendo así con una doble labor solidaria, en Soria y en Bigene.
El objetivo de estos proyectos no solo consiste en mejorar la calidad educativa y la asistencia sanitaria en Bigene, también en sensibilizar a la población soriana de la situación de "nuestros vecinos del Sur", como recalca Eduardo Lallana, intentando que con la colaboración de todos los ciudadanos de Soria, Bigene se convierta en una población en la que se pueda vivir dignamente. Un reto en el que todo el mundo puede participar.
EN BUSCA DE EQUIPAMIENTO PARA EL FUTURO HOSPITAL DEL SECTOR DE BIGENE
"En ningún sitio se ha visto lo que está pasando en Bigene", dice Buba Camara. Y es que la población local está levantando con su propio esfuerzo el que será el único hospital del sector bisauguineano.
A diario, tres pueblos acuden al lugar donde se instalará el hospital para avanzar con el proyecto, que se hará realidad gracias al trabajo y colaboración de todos los ciudadanos, y de las ayudas que llegan de los vecinos de Bigene. Cada familia aporta un kilo de arroz o dinero para poder comprar carne y pescado, el alimento necesario que les permite seguir con los trabajos, que apenas acaban de comenzar.
Este esfuerzo es fruto de la necesidad. En la actualidad Bigene solo cuenta con un pequeño centro de salud de dos salas, una para atender partos y otra para curaciones. Además, la situación de las carretas hace imposible muchas veces llegar a tiempo al hospital más cercano del sector, situado a unos 40 kilómetros de distancia.
EQUIPAMIENTO
Entre los proyectos de Tierra sin Males también está la búsqueda de equipamiento para el hospital de Bigene, y Eduardo Lallana cree que "los sorianos podríamos hacer realidad este sueño".
El objetivo es conseguir 40 camas de hospital, que se podrá hacer posible tras la reforma del hospital soriano de Santa Bárbara. Todos los equipamientos se renovarán y los antiguos irán dirigidos a Bigene.
Tierra sin Males pretende que esta colaboración no se quede aquí y perdure en el tiempo. "Tal vez puedan ir equipos médicos allí durante un tiempo para ayudar y llevar a cabo operaciones, como ya se está haciendo desde otros centros hospitalarios de nuestro país".
MATERIAL ESCOLAR
Las sillas y pupitres en desuso de los colegios sorianos también llegarán a Bigene. Una noticia que ilumina el rostro de Buba y de todos los niños del sector.