Los ecologistas han alertado sobre la presencia de una capa flotante de materia orgánica y la aparición de un barbo muerto en la zona.
Asden alerta sobre un nuevo vertido contaminante en el Duero, avistado a las 16:30 horas del viernes, 17 de febrero, en el Embalse de los Rábanos. Según palabras de la asociación, aparecía "una capa flotante de materia orgánica más gruesa, extensa y fétida de lo normal, destacando la presencia de un barbo muerto".
Una vez contrastados lo hechos, los ecologistas procedieron a avisar al teléfono de emergencias 112, que a su vez trasladó la denuncia a las autoridades competentes.
La asociación ecologista ha detallado los efectos que estos vertidos tienen sobre las aguas del Duero, que además de deteriorar la calidad del agua de forma puntual, conlleva unas consecuencias a largo plazo como son la eutrofización del Embalse de Los Rábanos, en el cual hay sedimentado una elevada cantidad de materia orgánica en descomposición, e incluso de sustancias tóxicas. Elementos que podrán generar graves problemas de salubridad para el hombre y para los ecosistemas, según Asden.