El presidente de la entidad deportiva reseña su agradecimiento en una emotiva carta después de 40 años de impulso al deporte que ha demostrado el colegio que ahora cierra.
Con palabras de recuerdo y tristeza, el presidente del CD San José muestra su agradecimiento a los Padres Franciscanos por haber acogido a la entidad deportiva durante casi 40 años ahora que el centro educativo cierra sus puertas.
La carta, literalmente, es como sigue:
“Resulta paradójico comprobar que el año en el que desde nuestro querido Club Deportivo San José celebraremos el cuarenta aniversario de nuestra existencia, nuestro amado colegio vaya a cerrar sus puertas tras 97 años de actividad docente.
Inimaginable resultaría que desde la dirección del Club no mostrásemos nuestra gratitud hacia la congregación de los Padres Franciscanos. La gratitud es la memoria del corazón. La memoria enlaza nuestros éxitos deportivos con nuestro Colegio y el corazón no nos permite guardar silencio.
Desde la responsabilidad que nos ocupa, la de guiar la formación personal y deportiva de más de doscientos cincuenta niños y jóvenes, nos hubiera gustado poder celebrar el fin de un ciclo muy especial en la vida de nuestros hijos, sobrinos, primos, amigos, conocidos o de nosotros mismos, pero por desgracia el único sentimiento en el que nos instalamos es en el de la tristeza.
No concebimos el Club sin la unión con nuestro Colegio y por ende, sin la congregación Franciscana. Las vivencias serán recordadas y nos acompañarán siempre, pero la añoranza de simultanear una gestión educativa y deportiva con los fundamentos doctrinales franciscanos será para la eternidad.
Nuestros Padres Franciscanos han sabido adaptarse a los cambios en la sociedad y nos han guiado a transformar nuestro Club a través de sus valores. El tiempo ha pasado y nuestra entidad ya no se compone solo de esos jóvenes que en las aulas maduraban espiritual y personalmente y luego a través del club crecían juntos deportivamente.
Nos han enseñado a integrar a todos aquellos que independientemente de su procedencia, querían compartir nuestros valores franciscanos a través del deporte. Desde el Club asumimos hace tiempo ese reto. Si bien es cierto que a partir del próximo curso nos quedamos sin esa ecuación espiritual en la formación de los integrantes de nuestra entidad deportiva. Nuestra entidad continúa, pero nuestra identidad se verá muy debilitada.
Sin acritud mostramos nuestros sentimientos… Con conocimiento de que nuestro Club se forjó alrededor de la Asociación de ex alumnos allá por 1978… Sin olvido de todas las ramas culturales, deportivas y sociales que llegamos albergar… Con nostalgia de nuestros éxitos deportivos en los que nunca podremos olvidar el subcampeonato de la Recopa de Europa y el Campeonato de Liga de voleibol en 1994… Sin marginar a ninguno de los que hicieron que fuéramos el espejo en el que mirarse… desde la dirección del Club Deportivo San José decimos alto y claro que todo ello se forjó con el fundamento de nuestros Padres Franciscanos”.