El líder del sindicato en Castilla y León, Faustino Temprano asegura que tras el comité autonómico de la organización, el 15 de junio, el sindicato deberá celebrar su convocatoria provincial para dirimir qué persona llevará las riendas de la Unión General de Trabajadores en Soria.
Este martes, el secretario general de UGT en Castilla y León, Faustino Temprano visitaba la sede del sindicato en Soria donde celebraba una reunión de trabajo con miembros de las distintas federaciones que aglutina.
Además de repasar diversos aspectos de organización y el funcionamiento interno, Temprano se ha referido a la situación del sindicato en la provincia, con 4.000 afiliados, y carente de una cabeza visible hace un año. Una circunstancia por la que se está actuando “estatutariamente” para zanjar la situación y encontrar a “quien dé el paso” para ostentar este cargo, si bien esta persona debería contar con al menos el 15% de los avales, diez puntos menos que anteriormente sentaban las bases del reglamento ingerno. Con todo, ha garantizado que no será nadie de fuera de la provincia y que será “más pronto que tarde”, si bien ha reseñado también que por el momento no se ha postulado nadie a tal fin.
El dirigente sindical ha explicado que Soria todavía no ha celebrado su congreso con los órganos de dirección, al contrario que en el resto de la Comunidad, por lo que deberá ser constituido, si bien existen otros órganos estatutarios que pueden dar “una solución definitiva” a esta situación.
Así, a partir del 31 de junio habrá de estar constituido dicho comité donde por otro lado el sindicato ya tiene formalizadas dos de las tres federaciones que aglutina –Empleo de servicio público y Servicios, movilidad y consumo, a falta de Industria, construcción y agro-.
Por otro lado, Temprano ha resumido el panorama social y económico de la provincia, donde la despoblación y el envejecimiento son los mayores problemas, por lo que ha exigido apoyos económicos a Junta y a Gobierno para poner solución a estas cuestiones.
Por último, ha valorado “negativamente” los presupuestos regionales para este 2017, ya que tendrán una vigencia de medio año tras ser aprobados en sede parlamentaria, si bien su ejecución se verá reducida “a dos ó tres meses” lo cual “no servirá para nada”. “No inciden en recuperar el Estado de bienestar ni van a producir una cohesión territorial en Castilla y León”, ha concluido.