El organismo de cuenca lleva a cabo labores de limpieza y retirada de vegetación seca en el primero y derriba un puente peatonal en el segundo.
La Confederación Hidrográfica del Duero, organismo adscrito al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, acaba de concluir dos actuaciones de mejora de cauces en los ríos Pedrajas y Abión, a su paso por las localidades de Cidones y Abioncillo de Calatañazor, respectivamente, que han tenido coste total de algo más de 57.000 euros.
La intervención llevada a cabo en el primero de estos ríos se ha centrado, sobre un tramo de 2,6 kilómetros a la altura de Cidones, en la extracción de vegetación seca arrastrada sobre el lecho. En concreto, se ha procedido al apeo y saca de numerosos chopos caídos y con inclinación hacia el cauce, con riesgo de vencerse, además de retirar mediante el uso de maquinaria la acumulación de ramas que forma tapones naturales.
Los trabajos -con un importe de ejecución de 41.954 euros- también han incluido la poda de árboles próximos al cauce hasta una altura de dos metros, para evitar que el desprendimiento de las secas obstruya la circulación del agua, y la eliminación de todos los restos vegetales generados durante la actuación. Los de mayor tamaño procedentes de las labores de poda fueron puestos a disposición de los vecinos.
Como nota curiosa, hay que destacar que en un tramo de 200 metros, y a instancias de los agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, la actuación se ha paralizado de forma temporal por la presencia de un nido de milanos, para evitar causar molestias a las aves.
Por su parte, la intervención de la CHD en el río Abión, a su paso por la localidad de Abioncillo de Calatañazor, ha permitido demoler un antiguo puente peatonal, con peligro de derrumbe por su mal estado y en desuso por la existencia de uno de nueva construcción, cuyos restos de derribo fueron trasladados a un gestor autorizado.
Con un importe de 15.186 euros, las tareas se completaron con los tratamientos silvícolas efectuados en una longitud de 200 metros aguas abajo del mencionado puente, consistentes en la eliminación de restos vegetales acumulados sobre el cauce y la poda aquellas ramas más inclinadas hacia el río.
Al igual que en el caso anterior, los restos mayor tamaño precedentes de la limpieza manual fueron acopiados para uso de los vecinos que lo desearan.