La entidad facilita el suministro a instancia de la orden de los Misioneros Combonianos.
La Fundación Pedro Navalpotro ha construido un nuevo pozo de agua potable en Benín, concretamente esta vez en la localidad de Toko-Toko, poblado situado al norte de la capital del país africano, Porto Novo.
La construcción se ha podido llevar a cabo a instancias de la orden de los Misioneros Combonianos, quienes se harán cargo de su buen uso y mantenimiento. Los beneficiarios directos serán unas 350 personas pero pueden llegar a las 900 de forma indirecta, ya que se encuentra cerca de pequeños poblados con escasez y necesidad de agua potable.
El objetivo primordial del proyecto es facilitar el acceso de agua potable al mayor número de habitantes posible como aldeas cercanas al mismo.
Junto a ese objetivo, en la fundación se plantean fortalecer la cohesión social de la comunidad, al proveer una pequeña infraestructura que será de gestión de la misión y uso comunal, de cuyo buen funcionamiento depende el bienestar de todos los usuarios. Con ello esperan Esperamos que la iniciativa lleve a fortalecer la cooperación y la responsabilidad de todos los beneficiarios.
Para la población más vulnerable, la instalación de este sondeo supone evitar una tarea, además de trabajosa, peligrosa, ya que los habitantes tenían que desplazarse a grandes distancias, y sobre todo por el gran riesgo que corrían al recoger agua contaminada en muchas ocasiones.