Quien fuera arzobispo y Virrey de la Nueva España, además de obispo de Osma, recibe el reconocimiento como precursor de los cimientos de esta ciudad.
El beato Juan de Palafox y Mendoza, quien fuera obispo de Osma y antes de Puebla de los Ángeles, en México, recibía un homenaje la pasada semana en el Congreso de Puebla donde su nombre fue inscrito con letras de oro, ceremonia que estuvo encabezada por el gobernador, Antonio Gali Fayad.
El mandatario mexicano aseguró que al beato Palafox “se le reconoce como precursor de los cimientos de Puebla, de buena parte del patrimonio de la Angelópolis, en 1646 fundó la Biblioteca Palafoxiana, la primera en América Latina, ordenó concluir la construcción de la Catedral, etc.”.
También recordó que “ayudó a poner fin a la situación de corrupción política, nepotismo administrativo y contrabando, ayudó a los indígenas y españoles pobres, saneó la hacienda de Nueva España y ordenó el pago de salarios dignos”.