El Mercado Medieval, que se viene celebrando en estas fechas otoñales cada año, rebosante con las buenas temperaturas.
El buen tiempo y el puente del Pilar está haciendo que el Mercado Medieval en la ciudad, que abre cada año por estas fechas de otoño, se vea rebosante de público en su recorrido, que une la plazas Mayor y Mariano Granados a través del Collado.
En esta edición se ha batido el número de puestos, con 150, en una cita que se extiende hasta el domingo y en la que se ofrecen productos alimentarios y artesanías, además de actividades, atracciones y talleres para los niños junto a escenificaciones que hacen regresar al Medievo.