El certamen, que premiaba a una instantánea de Felicísimo Verde, puede ser contemplado en resumen hasta el 15 de noviembre.
Las 30 fotografías finalistas del Concurso de Fotografía ‘COPISO 50 Aniversario’, que ganó una inquietante imagen ‘Geometría en marzo’ de Felicísimo Verde, pueden verse en la sala de exposiciones de la plaza de toros hasta el próximo día 15 de noviembre. Este concurso forma parte de las actividades programadas por la cooperativa soriana, con motivo de la celebración de su medio siglo de vida. La temática de las fotografías es ‘La actividad agraria y ganadera unida a los paisajes sorianos en el contexto del medio rural’. El horario es de 11:30 a 14:00 horas por la mañana, y de 17:00 a 20:00 por la tarde, de lunes a sábado.
El segundo premio se lo llevó la fotografía ‘Sobreviviré’, de Marta Postigo Palomar; y el tercero ‘Pastoreando con Benito’, de Natalia Pancorbo Hernández. Asimismo, dada la dificultad de elegir los tres primeros premios por la calidad de los trabajos, se reconocieron dos accésits para las imágenes ‘Camino a la viña’ de Pablo López Herrero; y ‘Vacas en la Dehesa Boyal de Vinuesa’, de José Pascual López Nuez.
De la fotografía ganadora ‘Geometría en marzo’, de Felicísimo Verde, el jurado -compuesto por representantes de la Asociación Fotográfica Mío Cid (AFOMIC) y de la Comisión Organizadora del 50 Aniversario de COPISO- ha valorado su sorprendente composición geométrica, su inquietante simbolismo, en una fotografía claramente ‘de autor’, que tiene el añadido de ser un encuentro casual con la ‘estética’ del trabajo que un agricultor ha realizado en su parcela.
Del trabajo del segundo premio, ‘Sobreviviré’, se ha destacado la dificultad técnica de la fotografía y el momento mágico conseguido en un rebaño que pastorea desentendido, con la excepción de la imponente figura que protagoniza la fotografía.
En el caso del tercer premio, ‘Pastoreando con Benito’, el jurado ha valorado, en un trabajo técnico correcto, la fuerza de la interacción existente entre un pastor y su oveja, la complicidad entre una figura humana y la de un animal. Una instantánea captada de manera natural, sin poses ni postizos, que transmite la satisfacción y la alegría del pastor que porta una oveja que acaba de parir.
En el accésit ‘Camino a la viña’ se ha resaltado la interactuación del trabajo agrícola del hombre con la naturaleza, en un sereno, inmenso e inabarcable paisaje que ofrece la conseguida composición. Finalmente, en el accésit ‘Vacas en la Dehesa Boyal de Vinuesa’, el jurado ha considerado la ternura de la imagen de un ternero mamando, en una combinación de colores variados, aprovechando un encuadre con pastos, el agua y los ocres del pantano, o el azul del cielo.
El presidente de AFOMIC, Juan Carlos Rodrigo, ha destacado la calidad de las fotografías presentadas, lo que dificultó la elección final, “porque todas ellas tenían méritos reseñables”.