Decenas de animales, en su mayoría perros, desfilan en las puertas de Santa Bárbara para recibir la bendición en la onomástica del santo de las mascotas.
Como cada año en este 17 de enero, decenas de animales de compañía, en esta ocasión en su mayoría perros -y algún gato-, se han dado cita en la entrada de la iglesia de Santa Bárbara para recibir la bendición del párroco Manuel Peñalba en el día de San Antonio Abad, patrón de los animales de compañía y conocido popularmente como San Antón.
Una cita que más de ochenta dueños con sus mascotas no han querido dejar pasar para reconocer el aprecio a estos seres que comparten en la mayoría de los casos un espacio en el hogar en muchas familias.
Según apunta la tradición, el santo nació en Egipto en el seno de una familia adinerada, pero su fe cristiana le llevó a donar todas sus riquezas a los más necesitados, para después retirarse al silencio y a la oración, con el fin de alcanzar la perfección espiritual de su alma. La observancia de los animales le llevó a aceptar que estas conductas suponían una pureza muy lejana al ser humano, de ahí que sea considerado como defensor de estos.
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