El 22 de enero de 1973, a las once de la mañana, llegó silenciosamente la muerte y se llevó a la Madre Clara cuando caminaba por el claustro del primer piso del Monasterio de las HH. Clarisas en dirección al despacho de la Madre Vicaria.
Para celebrar ese aniversario, en la iglesia de Santo Domingo se celebrará mañana lunes 22 una misa que presidirá el arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela, Mons. Francisco Pérez González, a las 13:00 horas.
Las HH. Clarisas de Soria están celebrando, hasta el próximo 11 de agosto, un Año Jubilar concedido por el Papa Francisco con motivo de los 75 años de exposición permanente de Jesús Eucaristía; esta gran obra, no sin grandes sufrimientos, fue llevada adelante por Madre Clara.
La Venerable Madre Clara fue "la virgen fiel y prudente que anhelaba la llegada del Esposo con la lámpara de la caridad encendida. Había combatido el combate de la fe corriendo hacia la meta sin entretenerse en el camino. Estremecida de amor, repetía con frecuencia y júbilo la estrofa que ella misma había compuesto con resonancias de canto nupcial: 'Ven, hermana muerte, ven, te espero con ilusión, para volar con mi Amado a la Celeste Mansión'".