En la convocatoria de subvenciones promovida por la Diputación de Soria. Estas ayudas van destinadas a apoyar la puesta en marcha de proyectos empresariales mediante la financiación parcial de las inversiones necesarias para el arranque de la actividad.
La convocatoria de subvenciones destinadas a financiar proyectos empresariales promovidos por emprendedores, mediante la financiación parcial de las inversiones necesarias para el arranque de la actividad empresarial, ha recibido un total de 22 solicitudes. Estas ayudas van destinadas a los emprendedores que inicien los trámites para poder desarrollar una actividad económica cuyo domicilio fiscal esté en cualquier localidad de la provincia de Soria, excepto la capital. La convocatoria cuenta con una partida de 310.000 euros y las ayudas consistirán en una subvención a fondo perdido que se determinará como un porcentaje sobre el coste subvencionable, obtenido en función de la puntuación otorgada aplicando los criterios de puntuación del proyecto, con un porcentaje máximo del 40% de la inversión subvencionable.
Serán proyectos subvencionables las inversiones en activos fijos, materiales, biológicos e inmateriales, necesarios para la puesta en marcha de la actividad empresarial, así como los gastos de constitución siempre que los bienes adquiridos sean nuevos; el proyecto empresarial no supere los 135.000 euros de inversión total ni sea inferior a los 30.000 euros (IVA excluido); y las inversiones subvencionables se inicien como máximo seis meses antes de la presentación de la solicitud de subvención.
Las solicitudes presentadas se puntuarán ahora sobre tres criterios de valoración: la zona de ubicación (25 puntos por estar ubicada en localidades de menos de 500 habitantes; 20 puntos por estar en localidades de entre 500 y 1.000 habitantes; y 15 puntos por estar en localidades de más de 1.000 habitantes); el promotor (10 puntos para proyectos puestos en marcha por parados de larga duración, 10 puntos para proyectos puestos en marcha por menores de 35 años y 5 puntos para proyectos puestos en marcha por mujeres) y el proyecto, valorando en este caso la viabilidad técnica y económica, el empleo creado, el nivel de fondos propios o que se trate de proyectos de carácter medioambiental o que empleen recursos endógenos.