El Río Duero viaja a Castellón (17:00 horas) donde se enfrentará al Illa de Grau. El cuadro celeste debe vencer en la Comunidad Valenciana y mirar de reojo a lo que ocurra en el FC Barcelona-Textil Santanderina y CV Melilla-Ushuaïa Ibiza. Los play-off, en juego.
Embalado en una segunda vuelta con pocos resultados adversos (cinco victorias y tres derrotas), el Río Duero seguirá la tónica habitual en estas últimas jornadas de la Superliga Masculina de voleibol: ganar y esperar a que Ushuaïa Ibiza y FC Barcelona “pinchen”, en estas tres últimas jornadas que restan. A pesar de que la cuarta plaza le queda a un solo punto, no depende de él mismo para cerrar la temporada 2017-18 dentro de los play-off. El “objetivo” sigue siendo “claro”. “A poder ser, sumar seis puntos (Illa de Grau y Vecindario) y llegar a la última jornada con posibilidades”, consideraba Manuel Sevillano, entrenador-jugador del Río Duero, en la rueda de prensa ofrecida el jueves. Próxima parada, Illa de Grau.
Por una autopista sin retorno. Envalentonados y sin frenos. El Río Duero, que ha tomado la directa, ya no puede parar, si quiere estar en los play-off 2017-18. Fallando una vez más (y quedan tres jornadas de Liga), el peaje saldría muy caro: no jugaría la fase dorada por el título de la Superliga. Contra el CV Melilla, “victoria muy buena y contundente (3-0)”, apuntó el míster de los celestes. Ahora bien, “prefería que hubieses ganado el Barça. La victoria de Ibiza, el que más claro tiene el calendario, nos deja a la espera de que pinchen algún partido de los que, teóricamente, no debería pinchar”, analizaba Sevillano. Y es que el triunfo (3-2) de Ibiza ante el Barcelona, le deja en bandeja la cuarta plaza, la de los play-off, a los insulares, que cierran el curso contra Melilla, Mediterráneo y Vecindario. “Una victoria del Barça hubiese significado tener más opciones”, sintetizó. Ibiza marcha cuarto con 31 puntos; Barça, con 30; Río Duero, con 30 también.
De aquí a final de temporada, “hacerlo muy bien”, determinó Sevillano en relación a la “esperanza” de llegar a Mallorca -última jornada- para medirse contra el Urbia Voley Palma con el “equipo vivo”. “Lo de esperar es secundario. Lo que tenemos que hacer es seguir trabajando bien. Para nosotros, tener ese objetivo (play-off) es bueno, para seguir entrenando bien y trabajando. Tener algo en la cabeza por lo que jugar”, estimó Sevillano sobre el ‘sprint’ final. “La idea es alargarlo hasta el último día”, matizó delante de esas opciones suculentas de poder disputar los play-off.
Habrá que “confiar”, reseñaba Sevillano, quien espera un tropiezo de sus antecesores. A priori, toda la plantilla estará lista para la contienda, vigésima jornada, en Castellón. Gerard Osorio y el mismo Manuel Sevillano arrastraban molestias a principios de semana. A tenor de las conclusiones del míster de los celestes, el Río Duero deberá “controlar” al opuesto del Illa de Grau, Iván Fernández, porque si a éste le sale un buen partido, será difícil “pararlo”. Luego, “es un equipo con cosas puntuales, del que me fío muy poco. Completito”, defendió Sevillano.
“Una segunda vuelta de escándalo”, definió Sevillano. El Río Duero, a colocar la guinda al pastel. Al técnico de Rioseco le costó hacer “arrancar” a la escuadra celeste: cada sábado, una historia diferente. Unas veces, “un equipo muy bueno”; otras, “un equipo que no sabía muy bien a lo que jugaba”. Al tramo final, el Río Duero llega masticando cierta madurez (física y psíquica). “Hemos perdido muchísimos puntos (en la primera vuelta)”, se lamentaba Sevillano. Quién sabe si los play-off ahora estarían más cerca… Aunque, el bloque soriano “sigue en la pelea”. El técnico de los celestes cree que gestiona “un equipazo”, que ahora lo está “haciendo muy bien”.