El concejal de Hacienda, Javier Muñoz, apunta que “las cifras y la foto fija de la economía municipal certifica el trabajo programado y planificado en el tiempo para obtener una estabilidad presupuestaria y evidencia que el modelo de ciudad se extiende también a los ingresos y gastos”.
El concejal de Hacienda, Javier Muñoz, ha presentado este lunes la liquidación municipal 2017 que se ha retrasado al mes de abril para poder contemplar el decreto gubernamental sobre la posibilidad de destinar parte del superávit a inversiones financieramente sostenibles.
La buena situación económica municipal ha permitido que Soria sea uno de los consistorios que podrá beneficiarse de esta medida que ha demandado durante mucho tiempo la FEMP y que hace que 1,8 millones de euros permitan mejorar distintas infraestructuras de la ciudad y con ellas el bienestar de los vecinos y vecinas. Javier Muñoz ha explicado que “la liquidación de hoy puede entenderse como una foto fija de la situación económica de la ciudad y lo que evidencia es que existe un modelo de ciudad que se extiende a todas las áreas y también a la de Hacienda con un trabajo planificado y programado y que ha hecho que tengamos unas más que saneadas cuentas con ahorro neto de 4,8 millones, una deuda de 64,25%, muy por debajo del límite del 75%, y un remanente de 6,6 millones, entre otros indicadores de esta salud económica”.
En líneas generales, la liquidación arroja como cifras destacadas el ahorro positivo de 4,8 millones de euros, un superávit de 6,2 millones de euros, un superávit ajustado de 2,8 y un remanente de 6,6. El resultado presupuestario es positivo con una cifra de 6,4 millones. Los ingresos corrientes rondan los 38 millones de euros y los gastos comprometidos los 33 millones. Respecto a la cantidad que finalmente se podrá invertir de forma adicional por los Ayuntamientos, el concejal ha explicado que la disposición gubernamental lo ha limitado a la diferencia de remanente y superávit y, por ello, la cifra queda establecida en 1,8.
Desde la Federación de Municipios siempre hemos defendido que las entidades locales que estamos cumpliendo económicamente pudiéramos revertir este esfuerzo en nuestros vecinos y no en amortizar deuda cuando ésta se encuentra en unos límites asumibles. Por ello, esta cantidad la usaremos para actuar en Las Concepciones, con una partida final de 400.000 euros, recuperar parte de la muralla, avanzar en la tercera fase del San Andrés y en pavimentación”, ha explicado Muñoz. El remanente sale de esta suma de 1,8 millones, los 3,8 comprometidos y 975.000 de Reindus de 2010. Por otro lado, la deuda se ha colocado en un 64,26%, la más baja de la última década con una cifra absoluta de endeudamiento con entidades financieras de 24.350.000 euros. La cifra de deuda total rozaría los 28 millones (28.050.000) sumando Avanza y Reindus.
Por otro lado, Muñoz ha confirmado que se refinanciará una parte importante de esta cifra, en torno a 8 millones, con una reducción de intereses en la vida útil del préstamo de 350.000 euros. El concejal también ha confirmado que “vamos a seguir amortizando deuda, pero al estar ya en niveles bajos, lo que haremos es reducirla en porcentajes más pequeños y seguir aumentando la inversión”.
Por último, se ha referido a la inversión y el estado de ejecución que en términos generales, con todos los capítulos, alcanza el 80%. El porcentaje de ejecución en inversiones autorizadas se sitúa en el 52% (12 millones) y en un 27% (6 millones) en el comprometido. “Es verdad que el porcentaje se puede incrementar y es especialmente bajo en aquellas actuaciones que están presupuestadas con ingresos de otras administraciones como la tapa del Espolón, las travesías, la muralla, el ARU, etc. y luego existen otras situaciones excepcionales como la Alameda que tiene su partida, se ha licitado, pero ha tenido renuncias de los ofertantes y debe volverse a licitar o el Plan Soria que está en proceso de ejecución tras superar la fase administrativa”, ha resumido el concejal.
Algunos de estos procesos verán la luz en el segundo semestre del año, como los derivados de la reinversión del superávit, una vez que, además, se superen las complicaciones iniciales de la adaptación a la nueva Ley de Contratos que entró en vigor en el mes de marzo.
Para concluir, ha insistido en que “las cifras son positivas y debemos entender estos presupuestos como una forma de poner blanco sobre negro los objetivos del equipo de gobierno y el uso de las distintas herramientas económicas como palanca de cambio para lograr la transformación de la ciudad”.