La Consejería de Empleo ha entregado los XI Premios al Cooperativismo y la Economía Social al Consorcio de Promoción del Ovino; a Energética Sociedad Cooperativa; a la empresa Embico Burgos, S.L.; y a Lorenzo González Torres, que reciben respectivamente el premio a la Mejor Empresa Cooperativa, Mejor Iniciativa Cooperativa, Mejor Empresa con otras Formas Jurídicas de Economía Social, y el reconocimiento a la persona que se ha distinguido por su Contribución al Desarrollo del Cooperativismo y la Economía Social. El sector de la economía Social cuenta en Castilla y León con 4.000 empresas que emplean a 30.000 trabajadores y facturan más de 4.000 millones de euros anuales.
El consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo, ha entregado los XI Premios al Cooperativismo y la Economía Social de Castilla y León en las categorías de mejor empresa cooperativa, mejor iniciativa cooperativa, mejor empresa con otras formas jurídicas de Economía Social y persona o entidad más relevante por su contribución al desarrollo del Cooperativismo y la Economía Social. La entrega de los galardones ha tenido lugar en el Centro de Soluciones Empresariales de la Junta de Castilla y León, en Arroyo de la Encomienda, Valladolid.
El reconocimiento, que tiene carácter honorífico, premia la gestión de empresas del sector y la labor de personas y entidades vinculadas al cooperativismo y la Economía Social de Castilla y León.
Asimismo, Carlos Fernández Carriedo ha avanzado que la Consejería de Empleo impulsará las nuevas medidas de apoyo a las Empresas de Inserción, puestas en marcha en 2017, para la contratación de técnicos de acompañamiento y la financiación del 50 % de los costes salariales de trabajadores en riesgo de exclusión con una inversión que alcanzará los 555.000 euros en 2018. Las Empresas de Inserción forman parte del sector de la Economía Social y tienen como objetivo la integración social y laboral de personas en situación o en riesgo de exclusión social.
Los galardones correspondientes a la XI edición de los Premios al Cooperativismo y la Economía Social han correspondido a las siguientes categorías:
La empresa galardonada en la categoría Mejor Empresa Cooperativa del Año ha sido el Consorcio de Promoción del Ovino de Villalpando, Zamora. Creada en 2002 como cooperativa de segundo grado es desde 2016 una cooperativa de primer grado que resulta de la integración de seis cooperativas anteriores.
El Consorcio es el primer productor de leche de ovino de España y de Europa con más de 700 ganaderos asociados. Tiene un claro compromiso con la creación de empleo indefinido a largo plazo que permite desarrollar otras actividades económicas sostenibles en el entorno rural. Agrupa 18.000 explotaciones de ovino, recoge 66 millones de litros de leche procedentes de 250.000 ovejas y produce 200.000 lechazos anuales, lo que le permite alcanzar una facturación superior a los 70 millones de euros anuales.
Recientemente, el Ministerio de Agricultura ha reconocido a esta cooperativa como una entidad asociativa prioritaria. Se trata, en resumen, de una empresa líder en el sector a nivel europeo con sus principales socios en Castilla y León, además de Navarra y Castilla-La Mancha.
El Consorcio de Promoción del Ovino mantiene también un compromiso con la reducción del impacto medioambiental, con un plan de desarrollo que permitirá aplicar un modelo de autorregulación productiva con mínimo impacto, con menores consumos de agua y energía, así como una generación menor de residuos sólidos orgánicos y de vertidos de aguas residuales. Cuenta con un departamento propio de I+D+i, que lleva a cabo proyectos de investigación nacionales e internacionales, y provee al ganadero de un servicio de diagnóstico de mamitis. Posee, además, un laboratorio propio de análisis y asesoramiento de alimentación animal mediante infrarrojo cercano.
En esta categoría ha sido premiada Energética Sociedad Cooperativa ubicada en Valladolid. Es una cooperativa sin ánimo de lucro dedicada a la comercialización y producción de energía eléctrica 100 % renovable. En apenas dos años de vida cuenta con más de 850 socios en Castilla y León, gestiona 900 contratos eléctricos y es copropietaria de una central hidroeléctrica.
Su actividad se centra en realizar la comercialización y producción, concienciando sobre el ahorro y la eficiencia energética, con criterios éticos y participativos tanto en la administración económica como en la gestión social y ecológica, con el objetivo de modificar el modelo energético y apostar por un modelo de economía social.
Además de la organización propia de la cooperativa, está comprometida con otras asociaciones en los ámbitos nacional e internacional de la economía social. Pertenece a SOM Energía, UNCCUER (Unión Nacional de Cooperativas de Consumidores y Usuarios de Energías Renovables), Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, Unión de Cooperativas de Castilla y León, y a nivel Europeo, a REScoop (European Federation of Renewable Energy Cooperatives).
El Premio a la mejor empresa con otras formas jurídicas de Economía Social ha recaído en la empresa Embico Burgos SL. cuyo promotor es Cáritas Diocesana de Burgos. Es una empresa de inserción laboral que ha permitido su incorporación al mercado de trabajo normalizado a 30 personas en riesgo de exclusión social.
Su apuesta inicial fue el Catering de comidas y lavandería a domicilio para personas dependientes, aunando, por un lado, la creación de empleo y, por otro lado, la respuesta a una necesidad social cada vez más presente que son las ayudas a la dependencia. Actualmente se está impulsando el catering de eventos, llegando a clientes con gran sentido de responsabilidad social que contratan sus servicios.
Apuesta también por la gestión de residuo textil en Burgos, a través de Proyecto ARROPA que promueve la sostenibilidad medio ambiental, al reducir, reutilizar y reciclar. También desarrollan otras actividades como son la limpieza, lavandería y agricultura a pequeña escala.
Por último, el premio a la persona o entidad que se haya distinguido por su contribución al desarrollo del Cooperativismo y la Economía Social ha recaído en el vallisoletano Lorenzo González Torres que ha desempeñado durante más de 40 años la dirección de Asprona Valladolid y posteriormente la Fundación Personas.
Inició su carrera profesional en la década de los 70 y se jubiló en 2015, dedicando toda su vida a generar proyectos de vida para las personas con discapacidad intelectual. Durante su gestión, y en el ámbito de los Centros Especiales de Empleo, lideró la creación del primer C.E.E en Valladolid, Asprona, en el entorno de la Asociación de Padres y Familiares de Personas con Discapacidad Intelectual de Valladolid. Posteriormente lideró la puesta en marcha y funcionamiento de GRUPO LINCE S.L.U., mercantil cuyo accionariado era Asprona Valladolid.
Asimismo, lideró la puesta en marcha de Fundación Personas, en Castilla y León, y que agrupó a cinco entidades sociales y sus Centros Especiales de Empleo en Palencia, Zamora, Segovia y Valladolid con la finalidad de potenciar y lograr una mejora en los modelos de gestión de este tipo de entidades. Durante su gestión se creó y consolidó un grupo empresarial de más de 500 trabajadores con discapacidad, principalmente con discapacidad intelectual.
Previamente a la entrega de los galardones se ha desarrollado una mesa coloquio que ha analizado el papel de las Empresas de Inserción en el ámbito de la Economía Social de Castilla y León, moderada por Miguel Santos, presidente de Empresas de Inserción Castilla y León. El debate ha contado con Guadalupe Martín, presidenta de la Federación de Asociaciones Empresariales de Empresas de Inserción España; con Naiara Zárraga, responsable de itinerarios de la empresa Ceislabur (Burgos); con Rodrigo Zatón, técnico de acompañamiento en la empresa Embico (Burgos); y con dos antiguas trabajadoras en inserción: Mª Concepción González, técnica de producción de la empresa Miraverintegración Puenteladrillo (Salamanca) y con Khadija Farass, limpiadora en la empresa Encina Servicios Integrados (Salamanca) y actualmente acabando su itinerario de inserción en la Encina.
Las Empresas de Inserción (EI) son un elemento indispensable dentro del sector de la Economía Social, ya que tienen como objetivo la dignificación de las personas con mayores problemas de integración socio laboral. Previenen por tanto las situaciones de exclusión social y tienen un importante papel en la rehabilitación e inserción de aquellos ciudadanos que han abandonado unos mínimos hábitos laborales y sociales.
Las EI son calificadas e inscritas en el correspondiente registro cuando al menos el 30 % de sus trabajadores son personas en riesgo de exclusión durante los dos primeros años y han de llegar a un mínimo del 50 % de trabajadores en riesgo de exclusión a partir del tercer año desde la calificación de la entidad como Empresa de Inserción.
Castilla y León cuenta con 12 EI que dan empleo a 216 trabajadores, de los cuales 136 están en serio riesgo o en situación de exclusión social y 80 son trabajadores no incluidos en procesos de inserción.
La Consejería de Empleo destinará más de medio millón de euros, en 2018, para impulsar el desarrollo de las EI. Con este objetivo se invertirán 340.000 euros para financiar los costes laborales de los trabajadores en situación de riesgo de exclusión social. Inicialmente se han convocado 214.000 euros que se ampliarán hasta los 340.000 euros. Asimismo se financiará durante este ejercicio con 215.000 euros la contratación indefinida de técnicos de acompañamiento en las Empresas de Inserción para la labor de tutela de los trabajadores en riesgo de exclusión
Este sector económico y del empleo cuenta en la Comunidad con más de 4.000 entidades entre Cooperativas, Sociedades Laborales, Centros Especiales de Empleo (CEE) y Empresas de Inserción, que generan más de 30.000 empleos directos y representan una facturación superior a los 4.000 millones de euros. Además, aproximadamente el 80 % de los contratos en las cooperativas y sociedades laborales tiene carácter indefinido.
El sector ha tenido una importante evolución en la Comunidad y ha contado con un firme apoyo de la Junta de Castilla y León. En concreto los CEE han aumentado desde los 47 que existían en Castilla y León en 1995, año en el que se reciben las competencias en esta materia, hasta los 215 en la actualidad. Los CEE cuentan hoy con siete veces más trabajadores que en 1995, 5.462 empleados con discapacidad frente a los 770 que había en el año 1995. Además se ha superado el objetivo de la legislatura de alcanzar los 5.000 trabajadores con discapacidad. Asimismo hay 2.102 cooperativas registradas en la Comunidad que dan trabajo a 9.231 personas entre socios y trabajadores, y 1.626 sociedades laborales que cuentan con 5.180 socios trabajadores y 1.658 socios capitalistas.
Las empresas de Economía Social comparten valores, como la preponderancia del factor humano sobre el capital, la igualdad y aplicación de principios democráticos en la gestión interna y el empleo natural de principios de responsabilidad social.