La muestra de la Diputación continúa recorriendo la provincia tras su paso por Santa María de Huerta. Soria y Gómara serán los próximos escenarios para esta exposición vinculada a los actos de conmemoración del 2150 aniversario de Numancia.
Tras su paso por Santa María de Huerta, la exposición de la Diputación de Soria ‘La indumentaria celtibérica en las cerámicas numantinas’ ha recalado esta semana en Langa de Duero donde permanecerá hasta el próximo 10 de junio en el salón del Ayuntamiento. La Institución Provincial exhibió esta muestra el pasado año en el Museo del Traje Popular de Morón de Almazán, dentro de los actos de conmemoración del 2150 aniversario de Numancia, y durante esta anualidad la ha puesto a disposición de los ayuntamientos interesados para que pueda ser visitada en diversos puntos de la provincia. Tras su paso por Langa, la exposición podrá contemplarse en Soria capital y Gómara en fechas todavía por confirmar. Además, los ayuntamientos interesados pueden ponerse en contacto con el departamento de Cultura y Juventud de la Diputación de Soria para cursar su solicitud.
Esta exposición refleja cómo la arqueología ha permitido a los investigadores conocer los aspectos cotidianos de los numantinos a través del estudio de los restos de las casas y sus enseres. La indumentaria por su parte suele dejar escasos vestigios arqueológicos. En el caso de Numancia, se cuenta con las pinturas de las cerámicas decoradas y los restos arqueológicos de la necrópolis como fíbulas, broches de cinturón, pectorales, cuentas de collar, armas, etc. Ninguna otra ciudad celtíbera ha proporcionado tan abundante y rica colección de vasijas de cerámica pintada, cuya decoración presenta rasgos singulares.
La representación de los ropajes que se puede ver en la exposición es bastante sucinta, aunque se aprecian numerosos detalles decorativos y referencias a los adornos de cabeza como mantillos, cascos y cimeras. La combinación del estudio de los textos clásicos, las piezas arqueológicas, las monedas y las pinturas de las cerámicas han permitido a los investigadores recomponer la indumentaria que vestían los numantinos, así como los detalles decorativos de las prendas, sus adornos, su forma de colocación y los diferentes grupos que constituían la sociedad numantina en relación al género, estatus o función social.
Las representaciones femeninas son muy escasas, pero permiten conocer claramente el modo de vestir de las mujeres numantinas. Cubrían su cuerpo con una larga túnica de tonos claros, complementaban con una especie de delantal o faldellín decorado con motivos geométricos. Se han encontrado multitud de adornos de bronce, pasta vítrea y algunos de plata que complementarían el atuendo femenino como pectorales, fíbulas, broches de cinturón y, más raramente, anilllos, pendientes, cuentas de collar, además de adornos circulares cuyo uso no está aún definido con claridad.
Las abundantes figuras masculinas que aparecen en las cerámicas ilustran claramente diferentes modos de vestir de los varones según se representan actividades cotidianas, rituales o simbólicas. En líneas generales, ilustran como los hombres vestían corta túnica sin mangas, ceñida por un cinturón, sobre calzón corto atado con cintas colgantes. Estas prendas estaban tejidas en lana y podían estar decoradas con franjas. Las piernas se cubrían con polainas o grebas de piel de cordero enrolladas a las pantorillas. Se han documentado distintos calzados, como abarcas de suela de esparto, botines de tacón alto y botas de cuero. Todos ellos se sujetaban a las piernas con correas. Cascos con cimeras y monteras y gorros de piel servían para proteger y cubrir la cabeza de los numantinos, aunque celtíberos solían lucir largas cabelleras con el pelo suelto o ceñido con una cinta.