Cientos de personas en Ágreda cumplen con la tradición de obsequiar a la Virgen en una jornada donde apenas una leve y ocasional llovizna no impide el acto.
Si por la mañana en el parque de la Dehesa de Ágreda los pequeños disfrutaban con una exhibición de medios técnicos y humanos de la Guardia Civil y donde la climatología respetaba en parte este acto, por la tarde, la ofrenda floral a la Virgen de los Milagros tampoco se vio deslucida por la lluvia.
Y es que las tormentas arreciaron por diversos puntos de la provincia, no así en la Villa de las Tres Culturas, donde apenas se dejaron notar los chubascos a la hora de la ofrenda floral celebrada por la tarde y en la que los fieles, ataviados en su mayoría con vestimenta tradicional, pudieron obsequiar a la Patrona de Villa y Tierra.
Por la noche, el Rosario de Cristal también salió para entonar esta oración mariana, y donde los fieles portan faroles, cada uno representando una avemaría.
Este sábado, día grande de las fiestas agredeñas, la procesión con la imagen de la Virgen de los Remedios (la talla con la advocación de Los Milagros solo sale cada 25 años del templo), recorrerá las calles de la localidad y miles de romeros, llegados de Castilla y León, Aragón, Navarra y La Rioja, pasarán bajo las andas para pedir protección y que se cumplan sus peticiones.