El cuadro soriano bebe de dos reflejos ocasionados en Navarra y Andalucía. Como ambas entidades, los numantinos buscan ser el tercer club que asciende a Primera (desde que se restableció el play-off en la campaña 2010-11) bajo la condición de ser el último clasificado en la Promoción.
Mira, mamá, sin frenos. Como un niño que se envalentona en sus primeros rodeos encima de su bicicleta nueva, al CD Numancia tampoco le frenan los palos -los condicionantes desfavorables- en las ruedas del vehículo en el que circula hacia Primera. El cuadro de Jagoba Arrasate, que en La Romareda tocó y experimentó con las teclas adecuadas (1-2), viaja con un cohete espacial en estos play-off 2018. Velocidad endiablada. Se han revelado, y contra el Real Zaragoza (3-2) pasearon la oficiosidad y el virtuosismo del que menos opciones tenía en estos juegos promocionales. ¿Quién llega último, ríe mejor?
El Numancia, ya en la antesala de Primera, va asimilándose al 'Caso Córdoba' (2013-14) y al 'Caso Osasuna' (2015-16). En ocho años, desde que se restableció nuevamente el sistema de play-off en Segunda, esos dos equipos ascendieron a Primera bajo la condición de ser el último clasificado en sus respectivas Promociones: el Córdoba quedó séptimo y el CA Osasuna, sexto. "Lo que estamos haciendo es impresionante. Lo de Zaragoza (La Romareda) fue una locura. Es lo mejor que he vivido yo en mi carrera. Ahora lo que queda es culminar: ascender. No queda otra. No podemos dejar pasar esta oportunidad", narra Alberto Escassi, el '8' fijo de Arrasate sobre el tapete, a Soria Noticias. La estructura numantina alcanza por primera vez en su historia una final de Promoción para ascender a Primera división. Como contrapunto, el Real Valladolid ya sabe lo que es ascender a Primera después de superar una fase de play-off (2011-12).
La tesitura actual lleva al Numancia a encontrarse con la necesidad moral de ascender. "El ambiente en el vestuario es buenísimo. Estamos súper convencidos. Súper motivados. Con una confianza enorme. Creemos mucho en cómo hemos llegado hasta aquí", valora el jugador malagueño sobre qué siente el vestuario numantino. Escassi valora la rampa que les lanzó hacia una autoestima que ahora vuela entre las nubes: "El partido contra el Zaragoza nos ha dado mucha fuerza, confianza y alegría. Sabemos que está en nuestra mano", argumenta.
El abatimiento físico y psíquico, pues la temporada 2017-18 ya se encamina a los 11 meses de prolongación, se esconden lejos de las piernas y de las mentes de los jugadores rojillos. "Somos el equipo de Segunda que más partidos ha jugado (42 partidos de Liga, 6 partidos en la Copa del Rey y, hasta ahora, dos partidos de play-off). Ahora lo que queda es descansar y recuperar bien. Comer bien y dormir bien. Entrenar lo 'justito'. Sobre todo, el que tenga molestias, que se trate", pronuncia Escassi sobre las dolencias y la fatiga. Íñigo Pérez, por ejemplo, se está tratando en las últimas horas un edema, el cual no le impedirá afrontar la final de la Promoción con el Numancia. El que sí se la perderá es Unai Medina, pues el lateral vasco padeció una rotura que le hizo abandonar el pasado Zaragoza-Numancia en el minuto 5. Esta mañana, éste abandonaba Los Pajaritos en muletas. El poder psíquico cobra vida "en estas alturas de la temporada" porque "la mente es más fuerte que las piernas.
Paso a paso, piano a piano y derbi castellano a las puertas de Primera. Numancia-Pucela, ida de la final de la Promoción (20:30 horas, Los Pajaritos). "Es el Real Valladolid el que debe estar preocupado", precisa Escassi sobre la carrerilla que está asumiendo el cuadro soriano. "Muchísima gente con el 1-1 (Numancia-Zaragoza) nos daba por muertos. Hemos dado un golpe encima de la mesa. Ahora, creo, la gente nos tiene en cuenta", agudiza el mediocentro/central. "Haciendo nuestro trabajo y sin mirar a nadie más, hemos llegado a la final de los play-off", apunta Escassi.
Ante el Real Valladolid, Escassi depara "una eliminatoria a vida o muerte. Son finales. Van a ser partidos muy físicos, de mucho contacto, con mucha intensidad. Dos equipos que nos jugamos ascender a Primera división". A Escassi le supondría "un sueño" alcanzar la gloria con el CD Numancia: "Una locura. Estoy en casa con mi mujer y cada vez que lo pienso me entra un cosquilleo en la barriga...".