Hacer deporte no está reñido con pasarlo bien. Esto es por lo menos lo que aseguran desde La Nave. El objetivo es conseguir un cuerpo en forma desde el cuello hasta los pies utilizando todos los materiales y técnicas que ponen a nuestra disposición. Además, en verano tienen sorpresas.
Con el ascenso de las temperaturas la ropa aligera en tela, y lo que antes tapaba un jersey de lana queda ahora al descubierto. Pero los milagros mejor a Lourdes, las dietas que prometen resultados a corto plazo sólo provocan un efecto rebote demoledor. Deberíamos mentalizarnos de que lo importante es tener un estilo de vida saludable que nos permita mantener el equilibrio físico y mental. La alimentación es esencial y el deporte debería incluirse en cualquier rutina semanal.
En La Nave lo tienen claro, conseguir estar en forma no tiene por qué estar reñido con disfrutar del proceso. En cinco meses, que es el tiempo que este espacio lleva abierto en la capital soriana, han demostrado que sentirse bien engancha y se le puede coger cariño a sudar la camiseta.
Anselmo Díaz, uno de los responsables del proyecto, explica que lo que ellos proponen es “un entrenamiento funcional que se basa en circuitos de alta intensidad”. Esto, para los que todavía no conocen el método significa que “se combina el tiempo de acción (o esfuerzo) con el de recuperación, por intervalos, para trabajar toda la musculatura del cuerpo. El objetivo es trabajar desde el cuello hasta los pies para conseguir la armonía”.
Sí, de nuevo se repite el concepto de equilibrio. Olvídese de la imagen más habitual del hombre de gimnasio en el que la mitad superior del cuerpo está hiperdesarrollada, mientras que las piernas han quedado en el olvido.
Para este entrenamiento funcional en La Nave preparan sesiones que rondan la hora y cuarto de duración, y en las que monitor y alumno se sirven de multitud de objetos y técnicas. Algunas de ellas son el paso de obstáculos, la escalada, sacos búlgaros, gomas de resistencia, levantamiento de ruedas, de barra..., y por supuesto el TRX, una técnica en auge en la actualidad.
Se trata de un método completamente revolucionario en Soria y, aunque pueda asustar, Anselmo tranquiliza, “cada ejercicio se amolda a las necesidades de la persona y el circuito se puede adaptar a todos los niveles. Es importante no empezar de golpe e ir poco a poco para no fatigar el músculo, pero para eso estamos nosotros”.
En verano La Nave sale al exterior con una serie de actividades que continúan conjugando deporte y ocio. La primera son las semanas de iniciación a la escalada.
“Se extienden durante 5 días y todas las mañanas estamos en el rocódromo, y el último día salimos al campo. Se aprende a asegurar, a hacer los nudos principales, a abrir vía... Lo esencial en este deporte”. Para un nivel más están pensados los cursos en vías ferratas. El sábado “se le da caña en el rocódromo” y el domingo “nos vamos de viaje”.
Pero si nuestra opción no es la escalada y preferimos las clases guiadas, con septiembre vuelve la actividad normal a La Nave. “Regresarán las clases de Parkour, Yoga, Pilates, gimnasia de mantenimiento para mayores de 65 años y, algo que nos hace mucha ilusión, las clases de Ninja Warrior para los pequeñines entre 6 y 10 años”.
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