Si quieres tener una melena como lucen algunas actrices de Hollywood no te frustres, es casi imposible. La mayoría llevan extensiones que les permite lucir una melena evidiable. Lo único que podemos hacer es que el pelo esté en las mejores condiciones. Un artículo de Lorena Martínez.
Para las melenas rubias, es un suplicio conseguir que el tono rubio del pelo luzca impecable durante los meses de verano. El sol, el agua salada de la playa, el cloro de las piscinas, la humedad o el abuso de las planchas y tenacillas hacen que las melenas rubias, que han sido tratadas con tratamientos de decoloración en el salón de belleza, presenten un aspecto estropajoso y amarillento o en ocasiones anaranjado.
Este tipo de pelo requiere mayor cuidado. A la hora de lavarlo, no olvides escoger champús y mascarillas con tonalidad azulada o morada, que sean capaces de acabar con el tono amarillento o anaranjado de este tipo de cabellos. Son realmente la solución más eficaz y te darán un tono blanquecino insuperable en tu pelo.
Además, no olvides usar productos de hidratación, en especial en las puntas durante las jornadas al sol. Puedes llevar un pequeño bote en tu bolso, y aplicarlo cada vez que veas que tu pelo está demasiado reseco. El aceite de argán es maravilloso.
En las épocas calurosas del año, el caballo está sometido agresiones continuas. Los rayos del sol, el cloro de la piscina, la sal del agua del mar, etc., hacen que nuestra melena sufra las consecuencias del verano.
Por eso, necesitamos unos cuidados extras. Cuando tu pelo está enredado y demasiado seco e, incluso, cuando tus puntas están ásperas y sin brillo. Puedes utilizar un cepillo de tratamiento capilar. Puedes enriquecer la dosis de acondicionador de mascarilla que uses normalmente, con la pulpa chafada de un cuarto de aguacate. Mezcla bien en un bol los ingredientes, y aplica el preparado después de lavarte el pelo, sobre el cabello húmedo.
Si sigues este consejo dos o tres veces a la semana, muy pronto notarás tu pelo más domable y con un aspecto más sano. Trucos como esté demuestran que para lucir una melena suave y brillante no hace falta gastarse mucho dinero, solo ser constante.
Además de castigar nuestro pelo con los factores ambientales, en ocasiones la caída del pelo puede estar relacionada con temas de salud. Cerca del 30% de las mujeres sufre alopecia en algún momento de su vida.
Y esto se debe a varios factores. Uno de ellos puede ser alteraciones hormonales. Es muy habitual experimentar una mayor caída del cabello durante el embarazo y la menopausia, debido a las oscilaciones hormonales que tienen lugar durante estas épocas de la vida. Es más difícil combatir la cuando está asociado a la menopausia.
Si además atraviesas una época de estrés intenso, tu pelo dejará de crecer y caerá. Si se trata de una situación puntual, el problema desaparece en unos meses, pero si se hace crónico, es posible que el pelo no vuelva a crecer si no se toman las medidas adecuadas.
Otra causa suele ser la anemia. Las dietas demasiado estrictas en esta época del año, las reglas abundantes, las úlceras y otros problemas pueden producir una anemia ferropénica, cuyo síntoma más visible es la caída del cabello.
Es importante aumentar el consumo de carnes y alimentos ricos en vitamina C que facilita la asimilación de este mineral.
En verano cuesta más cuidar las melenas, porque hay elementos más agresivos con el cabello, como el sol, las altas temperaturas, el agua... Por eso, es importante tener el pelo en las mejores condiciones posibles.