Más de 25 ganchilleras de la localidad participan el la I Exposición de Ganchillo que organizó la Asociación de Amigos de Añavieja el pasado fin de semana.
Como cada año, dicha asociación organiza a mediados de agosto una actividad que mantiene a los veraneantes unos días más en el pueblo antes de llegar sus fiestas en honor a la Virgen de Sopeña. Tras el concurso de postres de años anteriores y la primera jornada de la patata del año pasado, el 2018 se centró en el ganchillo. Un arte que domina más de la mitad de la población.
Durante la mañana del sábado, en rincones por el pueblo, las más expertas enseñaron a los más jóvenes del pueblo dicha técnica, que afianzaron por la tarde realizando banderines para decorar el pueblo estas próximas fiestas.
La actividad se centró en la exposición de labores realizadas a lo largo de una vida. Contando con más de veinticinco colaboradoras y las obras de Concha que con sus 99 años de edad sigue haciendo ganchillo.
Los típicos tapetes, colchas, sábanas y cortinas se fundían con bolsos, mantas, vestidos, claveles, monederos… unos llenos de color y otros -los más clásicos - en crudo o blanco.
En un ambiente con olor a lavanda, se homenajeó a esas mujeres que durante horas se han dedicado a este arte. Un letrero rezaba ¿Hay alguien capaz de calcular el tiempo invertido en esta sala?, y con frases sobre el tiempo y la dedicación, que se insertaban entres sus labores.
Al finalizar la jornada, una cena de gancho. Todo el pueblo cenando juntos, con todo aquello que se pudiera coger con un ganchillo (palillo) y esta vez en centro social en lugar de la plaza. El frío es lo que tiene.