Se ha celebrado sin incidentes y con la solemnidad e intensidad de siempre, en una noche calurosa con más asistentes, según el público presente.
La Bajada de Jesús de Almazán se ha celebrado con normalidad, ante la emoción de miles de personas, vecinos e hijos del pueblo, que no han querido perderse este momento tan especial y tan espectacular. Como marca la tradición, la llegar la procesión con la imagen de Jesús Nazareno, con una plaza Mayor a oscuras y repleta de público, se ha lanzado la impresionante traca y espectáculo de fuegos artificiales, en honor al Patrón. Son pocos minutos, pero intensos.
La traca y los fuegos artificiales ha sido espléndidos, de una gran calidad, espectacularidad y fuerza. No obstante, en la plaza se dejaron oir silbidos, porque el momento más fuerte de la traca se realizó de manera desacompansada, con el giro que hace la imagen del Cristo para volverse hacia la plaza Mayor parándose unos instantes, para luego salir de la plaza andando hacia atras.
Las fuerzas de seguridas hicieron un gran despliegue, con vehículos atravesados en las calles de acceso a la plaza, para evitar cualquier incidente.