Al técnico del CD Numancia, quien pasó por rueda de prensa antes de medirse mañana (18:00 horas) al Extremadura en Los Pajaritos, no le sirve que el protagonismo que busca para su bloque acabe en "dejadez" o en "apatía" en Soria.
Siempre que “el descontrol” (correcalles que genera el Numancia en ciertas fases de las contiendas) favorezca a los intereses sorianos será bienvenido. Por otro lado, lo que sí quiere tener controlado López Garai, quien durante esta mañana ha comparecido en la rueda de prensa habitual de cada viernes, es el partido que debe disputarse mañana (18:00 horas, Los Pajaritos). Como el Numancia no entienda que el Extremadura llega a Soria “con necesidades”, los numantinos pasarán “una tarde muy mala”.
La plantilla del Numancia está de buen humor, el “estado de ánimo es bueno”, subrayó López Garai, quien alegó que sus pupilos “han vuelto a coger energía” después de lo registrado (0-0) en El Sadar, donde el Numancia lo hizo “bien”. Toca refrendar “esas buenas sensaciones de una vez por todas en casa (en Los Pajaritos)”, señaló.
El Numancia persigue la segunda victoria de la temporada en Soria, dentro de Los Pajaritos. “Es cuestión del momento, de la situación y de las rachas”, aportó el técnico del bloque numantino. Sabe que el conjunto rojillo “está haciendo mejores partidos como visitante que en casa”, aunque espera que ese factor sea “anecdótico”. Valoró que “mañana es el día” para dar ese golpe encima de la mesa. “Mañana afrontamos un partido muy importante porque la última vez, delante de nuestra gente (ante la UD Almería), no estuvimos a la altura de las circunstancias”, consideró.
“Al final, la gente que viene a vernos jugar está deseosa de ver cómo hacemos por fin un buen partido”. El Numancia tiene “la responsabilidad” de enganchar a la gente, de que la afición se “ilusione”. Sienten la necesidad de “demostrar que somos un equipo con hambre y con alma”. Dejar a un lado lo que transcurrió con el Almería, “un accidente”. Luego, reflexión y, a la vez, autocrítica colectiva: “Puede ser que el mensaje que les doy a los chicos cuando jugamos como locales no acaben de entenderlo. Una cosa es que yo quiera, pretenda, llevar el peso del partido, que el equipo sea protagonista, y la otra es que eso nos lleve a la apatía y a la dejadez”, narró López Garai, quien denuncia que en Los Pajaritos el Numancia no da “la intensidad” que sí ofrece a domicilio.
“Marc Mateu no va a poder llegar porque tiene una molestia que no remite. Es mejor que pare y se recupere. Creo que a Guillermo le vamos a esperar una semana más porque no acaba de recuperarse”. A priori, dos sensibles bajas que prolongan lo acontecido en El Sadar. Por contra, el Numancia podría recuperar a Alain Oyarzun, Ripa y a Carlos Guitérrez, “que hasta el último momento será duda”.
A vuelta con una zaga que mejora por momentos, según los apuntes de López Garai. “Sí es cierto que en los partidos que llevamos no hemos podido repetir prácticamente defensa o alineación. Eso provoca que no haya una sincronización en la línea defensiva, que sostiene al equipo”, analizó el de Barakaldo. Ese entramado defensivo, cambiado cada dos por tres acorde a las situaciones que se van dando, “lo trastoca todo”. Porque “la estabilidad defensiva” determina “el termómetro del equipo”.
“Para mí, tiene menos puntos de los que merece”, situó López Garai así a los extremeños, quienes marcan la zona de descenso con 5 puntos. “El fútbol, a veces, no es uno más uno: dos. Este Extremadura tiene más juego y méritos que puntos”, definió. El Extremadura irá a Los Pajaritos “con necesidades” y como el Numancia no entienda eso, “pasaremos una tarde muy mala”.
López Garai persigue la versión que ofreció su Numancia en Pamplona. Y la que dio “en Gijón, en parte, la del Cádiz, por momentos en casa, o la de Córdoba, fuera”, explicó. Un hándicap que lo puede rompe todo: “Si no ponemos intensidad resulta imposible (ganar/puntuar)”, valoró el míster vasco. Se acoge a la “agresividad” y a la “intensidad” para que el Numancia salga a flote.
Al respecto de los espacios que se autogenera el Numancia cuando abre el campo y se vuelca en el ataque, “somos peligrosos”, manifestó. López Garai no le llora al descontrol: “Que el partido en un momento dado se descontrole nos puede venir bien”, detalló. No se adaptan “mal” a esa situación. Retó al descontrol: “Si el partido se descontrola y nos va bien, ¡qué se descontrole!”, exclamó.