Patronal y autónomos, coinciden en afirmar, con prudencia, que existe una “tendencia positiva” en el empleo aunque es preciso adoptar medidas de contención del gasto público.
Durante el cuarto trimestre del 2018, en Castilla y León, el número de personas ocupadas fue de 990.800, lo que supuso un incremento del 2,59% respecto al mismo trimestre de 2017, mientras que el número de parados fue de 125.100 personas en la Comunidad Autónoma, registrándose así un descenso del 18,46% en relación al mismo período del año anterior, y alcanzando una tasa de paro del 11,21%, según la Encuesta de Población Activa (EPA).
Para la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (CECALE) y la Federación de Autónomos de Castilla y León (CEAT Castilla y León), estos datos ponen de manifiesto que Castilla y León cerró el año 2018 con una “tendencia positiva” del mercado laboral, y es preciso “mantener la prudencia”, ya que la tasa de paro aún continúa en porcentajes destacados.
Por ello, patronal y autónomos han coincidido en abogar por la continuidad de las reformas estructurales, y por la “adopción de otras medidas que, como la contención del gasto público y la racionalización del sistema impositivo, apoyen o complementen a las referidas reformas y que contribuyan a que el tejido empresarial de la Región se vea apoyado y potenciado”.
Del mismo modo, CECALE y CEAT Castilla y León consideran que en estos resultados positivos de la Encuesta de Población Activa han tenido un papel protagonista los empresarios mediante su “intensa y continuada participación” en el Diálogo Social. En este sentido, ambas organizaciones esperan que los próximos acuerdos en los que se está trabajando se traduzcan en la “creación y consolidación de empleo estable en Castilla y León”.