La Consejería de Agricultura y Ganadería confirma que la moratoria es para el uso de platos y abanicos, pero no así para cañones.
El Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL) ha publicado hoy una resolución de 1 de febrero de 2019, de la Dirección General de Política Agraria Comunitaria, por la que se establece la clasificación de los criterios de evaluación de gravedad, alcance y persistencia, y el cálculo de las reducciones a los efectos de aplicar la condicionalidad de las ayudas de la Política Agrícola Común en el año 2019.
Se trata, en síntesis, de los requisitos legales de gestión y las buenas condiciones agrarias y medioambientales que deberán cumplir los agricultores que reciban pagos directos de la PAC, con los elementos a controlar y el procedimiento sancionador.
En lo que respecta al sector porcino, el preámbulo menciona que se considera necesario un año más de moratoria para que este sector esté en condiciones de cumplir la nueva normativa que prohíbe la aplicación de purín en las superficies agrícolas mediante sistemas de cañones, platos o abanicos, algo que no estaría permitido desde el 1 de enero de 2019.
El texto continúa con este matiz: “Y el uso de platos o abanicos estará condicionado a la evolución del proceso de adaptación de los equipos”. En ese sentido, y según recalcan ASAJA Soria, en la citada norma se recoge literalmente también que “en consecuencia, a la vista de la evolución de la maquinaria agrícola en 2018, y a pesar del importante esfuerzo realizado por los agricultores y ganaderos de Castilla y León para la adaptación de los equipos a la aplicación localizada de purines, se considera necesario un año más para que el sector esté en condiciones de cumplir la nueva normativa”.
Para la organización profesional agraria es preciso aclarar que si bien el uso de platos o abanicos cuenta con este año para adaptarse, “no ocurre así con el empleo de cañones, que no entra dentro de la moratoria y por lo tanto su utilización permanece prohibida”.