Como novedad, establece la posibilidad de optar por la totalidad del inmueble, sito junto a la calle Nicolas Rabas, o uno de los dos lotes en los que se divide el conjunto de la histórica construcción.
La Comisión de Régimen Interior, Personal y Patrimonio da hoy el beneplácito al borrador del segundo pliego de condiciones económico-administrativas que han de regir la licitación del edificio del antiguo Centro Universitario de Soria (CUS), ubicado junto a la calle Nicolás Rabal de la ciudad.
El presidente de la Diputación Provincial de Soria, Luis Rey, ha recordado que el proyecto se enmarca dentro de los usos permitidos en el Plan General de Soria, tanto el hostelero como los de servicios y cultural. La superficie útil de la parcela es de 4.347,83 metros cuadrados.
A diferencia del pliego anterior, se establecen dos posibilidades para optar a la licitación del edificio: una oferta por la totalidad del edificio, y otra de dos lotes, una de un millón de euros, y otra de tres millones y medio. En la propuesta, se valorara el criterio constructivo, según ha remarcado Luis Rey.
El primer pliego, cuya convocatoria quedó desierta, proponía una cesión de 40 años al adjudicatario y un canon mínimo a percibir por la Diputación Provincial de 71.142 euros anuales, con un periodo de carencia de tres años. De la misma manera otorgaba un plazo máximo para la realización de las obras y puesta en uso de las instalaciones de 36 meses desde la adjudicación del contrato.
El objeto de ese primer contrato era la constitución de un derecho de superficie sobre el edificio y solar con dos fases: la rehabilitación y recuperación del edificio y la posterior explotación del mismo conforme a cualquier uso que esté permitido por el planeamiento urbanístico de la ciudad de Soria.
Entre las exigencias iniciales, se incluía la rehabilitación integral del inmueble, de todas las instalaciones y equipamiento necesarios para cumplir su finalidad; la urbanización y cuidado de los espacios libres interiores del conjunto, así como la parcela colindante; la realización de todas las obras y actuaciones necesarias para la conservación del inmueble en estado óptimo con las garantías de cumplimiento de las normas sobre uso, policía y conservación de la obra pública; la adecuación, reforma y adaptación de la obra a las características requeridas en cada momento por la legislación; y la explotación de la obra conforme a su naturaleza y finalidad dentro de los usos y actividades permitidas por el planeamiento en vigor y cuantas disposiciones les sean aplicables.