Como le ocurriese al feudo de la SD Ágreda, que ha pasado a llamarse La Arquilla-Alberto Vitoria, otro estadio soriano sufre un rebautizo esta temporada 2018-19. El Ayuntamiento de Soria y el Calasanz han hecho posible que el césped artificial del antiguo Anexo de Los Pajaritos acuñe el nombre y el apellido de “un ejemplo” para los niños y niñas.
Oficialmente, la instalación capitalina y municipal asociada al ya exnombre de Anexo de Los Pajaritos pasa acuñar la denominación de estadio José Andrés Diago. Al filo de este mediodía, el Club Deportivo Calasanz, equipo que desempeña la mayoría de sus funciones futbolísticas en dicho espacio, ha comunicado en sus redes sociales que el campo de hierba artificial situado justo detrás del Nuevo Los Pajaritos adopta a partir de hoy los nombres de pila y el apellido de uno de los 'padres' del fútbol formativo de la provincia de Soria, José Andrés Diago.
No es la primera vez que en esta temporada 2018-19 un estadio soriano sufre un nuevo 'bautizo', pues desde este curso, el estadio de la Sociedad Deportiva Ágreda ha pasado a llamarse La Arquilla-Alberto Vitoria, incorporando así el nombre y el apellido del mítico futbolista soriano del Real Madrid, natural de la Villa de las Tres Culturas.
Hoy, 12 de marzo de 2019, se ha ejecutado una medida que ya se contemplaba meses atrás, desde que falleciese José Andrés Diago un 16 de junio de 2018. El Consistorio de Soria, que es el encargado de gestionar el complejo deportivo y municipal, ha validado la iniciativa expuesta por el fútbol base. Así pues, el recuerdo de Diago, quien a título póstumo ya ha recibido varios homenajes, como el de la Asociación de la Prensa Deportiva de Soria en la Gala del Deporte, se levanta en forma de estadio.
Sentido homenaje al primer entrenador que tuvo el CD Calasanz. El apellido Diago quedará ligado para siempre a la escuadra capitalina y en la jornada de hoy se constata todavía más esa vinculación. Desde el club blanquiazul, el cual entrena y juega en el nuevo José Andrés Diago, se complacen en anunciar tal buena nueva. A José Antonio Culebras, jugador de la SD Almazán y uno de los coordinadores del Calasanz, le faltan calificativos para referirse al "maestro" Diago. 'Cule' utiliza los siguientes términos para alabar a uno de los mentores del CD Calasanz: "Educador, noble y apasionado", define sobre una figura con "don de gentes".
Que el antiguo Anexo de Los Pajaritos pase a usar el apellido de un formador nato "significa que Diago sigue con nosotros", comenta Culebras. Bonita manera "de homenajear toda la labor que ha llevado (Diago) durante años, años y años. Ya no como entrenador, sino como educador", manifiesta el central de la SD Almazán. Considera Culebras que "los valores" de Diago "han quedado muy presentes en esta sociedad deportiva y futbolística".
Los niños y niñas del CD Calasanz ya saben lo que es entrenar en el nuevo José Andrés Diago. Hoy era tarde de entreno. Órdenes de los entrenadores, ejercicios de pegada y farolas encendidas, pues caía la noche en el rebautizado complejo municipal. Analiza Culebras que Diago, además de demostrar "un talante muy bueno", fue "un ejemplo". Un hombre de fútbol que siempre estuvo "alrededor de los niños, aportando lo mejor".
El Calasanz y el Ayuntamiento de Soria han llevado a cabo esa solemne "intención". Culebras cree que este "asunto" no sólo salpica al club y al propio consistorio, ya que "todos los clubes deportivos, y en concreto los de fútbol, estarán de acuerdo" en este cambio de nombre. Asimismo, Diago "es merecedor de ello", puntualiza Culebras, a quien le hace especial ilusión que se compita en el José Andrés Diago.
"Ese nombre quedará grabado para siempre". A partir de ahora, se podrán cantar goles y celebrar títulos en el José Andrés Diago, nuevo templo formativo. "Es importantísimo saber que detrás de ese nombre, de ese recuerdo, hay un gran trabajo", matiza el manchego. Por último, "los demás, los que vamos detrás de él, hemos de aprender muchas de sus actitudes y su comportamiento de cara a los chavales", resume 'Cule'.
En el tintero queda que en la prolongación del homenaje, en el nuevo estadio soriano, se mire y se señale el cielo tras el primer gol de los locales. Pues desde las nubes se lo estará mirando el San José del Calasanz, un tal Diago.